A partir del 1 de octubre de 2020, el Poder Judicial dominicano iniciará el paso a la Nueva Normalidad en la que se contempla la ampliación de los servicios presenciales en sedes de todo el país y la puesta en marcha de nuevos servicios virtuales a través del portal Servicio Judicial.

En esta etapa se habilitarán 146 sedes en todos los departamentos judiciales, las cuales cuentan con las condiciones de espacio físico mínimo requerido para operar, asegurando el distanciamiento físico que demanda el protocolo de prevención del Covid-19.

Aquellas sedes que por falta de infraestructura adecuada no entrarán en modalidad 100% presencial, atenderán sus procesos judiciales en oficinas dentro del mismo distrito judicial que sí cuenten con las condiciones físicas mínimas requeridas para ofrecer servicios presenciales. La lista de estas sedes será comunicada por los canales oficiales del Poder Judicial en los próximos días, previo al inicio de la nueva normalidad.

Durante la Nueva Normalidad, se mantienen habilitadas las sedes en los 11 Departamentos judiciales, quedando en funcionamiento todos los palacios de justicia, las cortes de apelación, y los tribunales de tierra; asimismo, entrarán en operación 76 juzgados de paz y 18 tribunales de niños, niñas y adolescentes.

Bajo esta modalidad, de manera presencial se podrá realizar consultas inmediatas de expedientes físicos, trámites relacionados con depósitos de asuntos y gestionar entrega de documentos. De igual forma, queda disponible el acceso a través de la plataforma Servicio Judicial en donde se pueden realizar todos estos procesos sin necesidad de trasladarse a una sede, agregándose además nuevos servicios. También, se podrá hacer uso del buzón desatendido, como estaciones de autoservicio para consultas en línea y llamadas a tribunales vía el centro de contacto *3191 y el 1-809-200-3191, indicó el director general de Administración y Carrera Judicial, Ángel Brito.

Se recuerda que el Plan de Continuidad de Labores del Poder Judicial se basa en una estrategia escalonada de reintegración, tanto en el ámbito administrativo como jurisdiccional, que ha permitido la integración laboral de juezas, jueces, servidores(as) judiciales de manera remota, mediante el uso de herramientas tecnológicas; garantizando así el acceso a la justicia y al mismo tiempo tomando en cuenta los protocolos de prevención y seguridad frente a la crisis sanitaria actual.

La apertura de las labores se realizó a través de dicho plan en tres fases: Fase Inicial y Fase Intermedia, donde los servicios se brindaban de manera virtual y se permitieron asuntos presenciales por medio de coordinación de citas previas en sedes establecidas. Posterior a esto, entró en vigencia la Fase Avanzada donde se habilitaron todos los procesos y servicios de manera virtual y presencial, dando paso a la Nueva Normalidad en donde los tribunales operaran bajo las condiciones que impone la actual crisis sanitaria.