El senador de la provincia La Romana, Iván Silva, destacó este domingo los orígenes del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) a favor de la ciudadanía, al recordar el liderazgo del fundador de dicha organización política, José Francisco Peña Gómez, con su icónico eslogan «Primero la gente».

Silva, quien además es un reputado médico cirujano, con especialidad en podología, y que militaba hasta hoy en el oficialista partido de gobierno, habló durante su juramentación en el PRD, un acto encabezado por su presidente, Miguel Vargas Maldonado.

A continuación las palabras íntegras de Silva.

Pido que me reciban como miembro del Partido Revolucionario Dominicano, si así ustedes lo tienen a bien, pues tengo el firme propósito de dedicarme a la política, desde la Visión, Misión y Valores sembrados por el Doctor José Francisco Peña Gómez, un líder político quien ejercía la política, entendida como la conciencia y el arte que se encargan de darle respuesta al problema más complejo que tiene todo ser humano, que es vivir. Si, un dirigente, si, dirigía y se ocupaba de la gente hasta su muerte, por buscar soluciones a los problemas que los dominicanos tenían para vivir, para una tarea política que, nunca necesitó un cargo público; ni mucho menos un salario.

Seguimos sus huellas, gloriosas en su visión política, ancladas en la libertad, el respeto a la ley, el orden público y la igualdad de oportunidades, y todas sus acciones institucionales, a las cuales le tocó dirigir, estuvieron orientadas por estos principios. Juega de la misma manera con la grandeza histórica del Partido Revolucionario Dominicano, su misión política en la cual descubrimos su dedicación incansable en procurar la supervivencia del pueblo dominicano, su bienestar, su vinculación social o ese sentido de los dominicanos de sentirnos parte de este país, donde quiera que estemos, pero sobre todo esa lucha constante para que cada uno de nosotros pudiera construir nuestro proyecto de vida.

Uso indebidamente dos palabras inmortales, Primero la Gente: El gran emblema de su visión y misión política y vocación democrática. Nunca fue una consigna, sino el verso más sublime que describe su laico apostolado político. Soy Senador de la República por la Provincia de la Romana, en la boleta de un partido que se define como peñagomista y de la internacional socialista, sin que, hasta la fecha haya logrado cerrar el enorme enigma que me embarga, esa brecha entre nuestra verdadera responsabilidad política,, democrática y social, y lo que la gente de mi país y demi Pueblo espera de nosotros y el poder que ellos entienden que podemos disponer para la solución de sus problemas, pero peor aún, si ese partido preside un gobierno derrochador de fondos públicosgigante, lerdo en atender reclamos, torpe en sus decisiones y débil en sus instalaciones.

Venimos a esta organización inspirados en la historia y la memoria que, a pesar de la ferocidad de los grupos hegemónicos en querer eliminar, sigue teniendo el Partido Revolucionario Dominicano, un instrumento de Intermediación Política, Social, laboral y cultural con una resonancia Popular más allá de las cifras electorales, si tomamos en cuenta la viabilidad y la contribución a la convivencia Pacífica, democrática, social, cultural y laboral, de los último 60 años de transición democrática. Sindicatos, Asociaciones, clubes deportivos y culturales, leyes que reivindican derechos nunca vistos, protección a niños y adolescentes, Seguridad Social, Protección a los derechos de la Mujer, formación Política, organizaciones para los derechos temerarios, por citar algunos casos .

Venimos aquí hoy Convocados por ese gran deseo que tenemos de la resurección del » BUEY QUE MÁS JALA» , pues el poder, distinto al siglo pasado es más Fácil alcanzar, más difícil de utilizar y más frágil de perder, para lo cual les ruego que juntos afrontemos los enormes retos institucionales, políticos democráticos, sociales, fiscales, monetarios, financieros, sanitarios, educativos, culturales, hospitalarios, laborales, de convivencia, de violación, Delincuencia, criminalidad y violencia organizada que pone en riesgo alarmante nuestra supervivencia Nacional y sostenibilidad como nación libre, independientemente y soberana.

Estamos aquí en el Partido Revolucionario Dominicano porque queremos obtener, conservar y mantener el poder el cual otras organizaciones políticas, con menor jerarquía se apropiaron, pues un su apogeo vetaron todas las oportunidades de de nuestro partido Glorioso. Somos hoy en el Senado un Micro Poder del Partido Revolucionario Dominicano, una fuerza en ascenso y capacidad para desafiar éxito a nuestros rivales, si ustedes están dispuestos a cooperar en esta tarea.

Concentremos nuestras energías en el bien común, como lo hacía Peña Gómez, en Primero La Gente, en un momento donde todos nuestros rivales buscan el bien propio, pues quien deciden toman decisiones muy tarde o nunca las toman y por eso la pérdida de los tres valores de Gestión política y democrática que identifican al Doctor José Francisco Peña Gómez: Confiabilidad, efectividad y eficiencia. Con éstas tres divisas lucharemos sin descanso y sin economía de ningún esfuerzo, para que nuestro Partido disponga de un mayor espacio en el reparto de las responsabilidades y representación Política en la República Dominicana.

Que Viva José Francisco Peña Gómez.

Que Viva el Partido Revolucionario Dominicano.

Que Viva la República Dominicana.