¿Producen los alimentos depresión?

¿Producen los alimentos depresión?

Dr. Félix M. Escaño Polanco
La depresión, una con­dición biológica que altera el estado de ánimo del individuo presentándolo como un ser “abatido e infeliz”, cada día aumenta en el mundo y se estima – según las estadísticas médicas internacionales que podría ocupar uno de los primeros lugares como causa de muerte para el 2025.

La persona deprimida puede pre­sentar insomnio, hiperactividad física y/o apatía, pero lo que más llama la atención es el “desgano y tristeza profunda” con marcada re­ducción de la autoestima y pensa­mientos, además de manifestar con frecuencia – en la intimidad fami­liar, social o laborar – su “deseo de morir”.

“Doctor, es como si el cielo se me pusiera negro” es una expresión frecuente en la consulta especiali­zada, no solo del médico psiquia­tra, sino de cualquier profesional de la medicina, pues se ha esta­blecido que la depresión acompa­ña en un porcentaje importante a “todas las enfermedades cró­nicas no transmi­sibles” (Diabetes, Obesidad, Artri­tis, Osteoporosis, enfermedades de la Tiroides, Asma Bronquial, Enfer­medades inmuno­lógicas, Cáncer, En­fermedades Cardio­vasculares etc.

Entender la nutrición en el deprimido es su­mamente importante, pues se ha establecido que el défi­cit de una sustancia conocida como serotonina que actúa equilibrando la funcionalidad eléctrica del cere­bro (junto a la dopamina, noradre­nalina, melatonina etc,.) se produ­ce en el organismo humano por la ingesta diaria a través de los ali­mentos de un aminoácido esencial conocido como triptófano.

El déficit de alimentos ricos en se­rotonina por tanto, puede “agra­var” el estado depresivo de cual­quier persona y además de los medicamentos especializados que científicamente han demostrado su capacidad regulatoria cerebral, usted no puede olvidarse del con­sumo de leche y derivados lácteos, frutas del grupo de las cítricas, los huevos, cereales integrales, el chocolate, la avena, los garbanzos, las nueces, los alimentos ricos en proteínas y fuentes de vitaminas del Complejo B, como son las car­nes y el pescado, todos los cuales, aportan serotonina al organismo humano.

Mantener las recomendaciones me­dicas y nutricionales en todo deprimido, es la clave del éxi­to y si usted quie­re “prevenir” esa enfermedad, agré­guele un plan de ejercicios con un tiempo mínimo de ½ hora diaria­mente.

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