Ámbar Frías 
En un esfuerzo por abordar las dificultades que enfrentan las mujeres del campo, la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas (CONAMUCA) presentó ayer el proyecto “Tejiendo Redes: Cultivando autonomía y crecimiento colectivo” con el que pretenden fomentar la economía de jóvenes y mujeres rurales.
La presentación contó con la participación y el apoyo del Centro de Investigación para la Acción Femenina (CIPAF) y la Asociación Solidaria Andaluza de Desarrollo (ASAD).
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El proyecto, inspirado por la falta de apoyo en la producción y la escasa intervención gubernamental ante los aportes realizados por las campesinas, tiene como objetivo impulsar la creación de políticas públicas que promuevan la soberanía alimentaria y desarrollo económico de las mujeres rurales, de acuerdo a lo expresado por Lutty Suero, coordinadora del CONAMUCA.
Suero señaló como uno de los desafíos la ausencia de datos específicos que permitan diseñar políticas públicas equitativas, lo que hasta el momento solo ha provocado la profundización de la brecha existente entre los entornos urbanos y los rurales.
“En el campo la pobreza, la discriminación y la desigualdad nos pega fuerte… más fuerte que en la ciudad”, afirmó desde el público Francisca Peguero.
Por otro lado, en respuesta a la falta de empleos, educación y un sistema salud accesible, Suero explicó que desarrollarán actividades como la capacitación de las campesinas, así como la creación de una red de comercialización y una empresa certificada B-Corp que actúe en beneficio de la comunidad rural.
El plan durará 24 meses e impactará de forma directa a alrededor de 6,430 personas y de manera indirecta a 10 mil mujeres y jóvenes.
