Acabo de leer un libro de Borges que contiene los textos de siete conferencias dictadas hace muchos años por el gran escritor argentino. En una de ellas, dedicada a la Divina Comedia, dice Borges que el Dante creía que el lugar o sitio donde están las instalaciones del purgatorio es antípoda de la ciudad de Jerusalén. Quizás sea útil tener los servicios de un astrónomo o de un geógrafo que haga los cálculos exactos. Al determinar el punto del globo terráqueo antípoda de Jerusalén, habremos localizado el purgatorio, siguiendo la confiable orientación poética del Dante. Deseo con vehemencia tener en claro si ese lugar está en el Océano Pacífico, cerca de Tahiti y de las Islas Marquesas.
El pintor Paul Gauguin a lo mejor vivió en el paraíso terrenal, que es el “penthouse” del purgatorio. Veamos lo que dice en otro texto Jorge Luis Borges acerca de la topografía de la Divina Comedia: “La astronomía ptolemaica y la teología cristiana describen el universo del Dante. La tierra es una esfera inmóvil; en el centro del hemisferio boreal (que es el permitido a los hombres) está la montaña de Sión; a noventa grados de la montaña, al Oriente, un río nace, el Ebro. El hemisferio austral es de agua, no de tierra, y ha sido vedado a los hombres; en el centro hay una montaña antípoda de Sión, la montaña del purgatorio”.
“Los dos ríos y las dos montañas equidistantes inscriben en la esfera una cruz. Bajo la montaña de Sión, pero harto más ancho, se abre hasta el centro de la tierra un cono invertido, el Infierno, dividido en círculos decrecientes, que son como gradas de un anfiteatro. Los círculos son nueve y es ruinosa y atroz su topografía; los cinco primeros forman el Alto Infierno, los cuatro últimos el infierno inferior, que es una ciudad con mezquitas rojas, cercada por murallas de hierro”.
“Una grieta que abrieron en la roca las aguas del Leteo comunica el fondo del Infierno con la base del purgatorio. Esta montaña es una isla y tiene una puerta; en su ladera se escalonan terrazas que significan los pecados capitales; el jardín del Edén florece en la cumbre”. (Disparatario; 2002).