La reanimación cardiopulmonar o RCP consiste en un conjunto de maniobras que se utilizan cuando una persona ha dejado de respirar o el corazón ha cesado de latir, con el objetivo de mantener el suministro de oxígeno a los pulmones y la sangre oxigenada circulando hasta a órganos vitales. La RCP es un procedimiento de emergencias que salva vidas cuando se presenta una situación o condición de salud que lleva a la parada cardiaca o respiratoria. Esto puede suceder después de una enfermedad clínica, traumatismos, descarga eléctrica, un infarto coronario o ahogamiento, así como cualquier otra condición clínica que deteriore el estado de salud del paciente.
Los objetivos de la RCP son: preservar la vida, recuperar la salud, aliviar el sufrimiento, limitar las secuelas y respetar las decisiones, los derechos y la privacidad de los individuos.
Debido a que la RCP se debe iniciar de inmediato en el momento de la parada, las decisiones en esta situación se toman en segundos, por médicos o paramédicos que en algunas ocasiones desconocen quién es el paciente, su historial de salud y enfermedades previas, o simplemente la autonomía o voluntad anticipada del propio paciente de no recibir reanimación.
En sala de emergencia, al presentarse una parada cardiaca es frecuente que el personal médico solicite a los familiares apartarse o salir del área donde se realiza la reanimación, ya que en la práctica médica en nuestro país, aun es controversial la presencia de algún familiar durante las maniobras de reanimación o realización de cualquier otra intervención crítica, a pesar de que la idea de un miembro de la familia presente durante la reanimación cardiopulmonar es apoyada y respaldada por diversas organizaciones internacionales, como la Asociación Americana de Enfermeras (ENA), la Asociación Americana del Corazón (AHA) y el Consejo Europeo de Resucitación.
La muerte es parte fundamental de la naturaleza propia del ser humano, pero eso no elimina el temor. Los principales miedos a encararla son el dolor, no encontrarse preparado y estar aislado de sus seres queridos, por lo que en algunos países se plantean ofrecer activamente a la familia la oportunidad de presenciar la RCP, en lugar de seguir la práctica habitual en las salas de emergencia, que cuando la condición del paciente empeora, el personal de salud solicita a los familiares salir del área de atención mientras estos son sometidos a procedimientos como la reanimación cardiopulmonar.
La reanimación presenciada. El concepto de reanimación presenciada nació en Michigan, ciudad de los Estados Unidos, en 1984 con opiniones encontradas entre el personal de salud, siendo un tema vigente que no ha sido resuelto en otros países donde el tema se sigue debatiendo.
En la República Dominicana existen mitos que encaminan a “un hacer médico enigmático”, debido a lo cual en algunas ocasiones los familiares desconocen hasta qué punto pueden involucrarse o presenciar el momento de la reanimación cardiopulmonar de sus seres queridos.
1. ¿La presencia de familiares entorpece las actividades de atención médica?
La presencia de familiares no altera ni el procedimiento de RCP ni sus resultados; tampoco la tasa de demandas médicas legales o reclamos. Sin perjuicio de lo anterior, como todo en medicina tiene sus limitaciones y los resultados no son siempre generalizables, sobre todo entendiendo de forma particular que nuestra población amerita sensibilización y educación en este sentido, ya que un familiar con comportamiento inadecuado, un paciente con heridas graves o personal médico excesivamente dubitativo, sin las competencias adecuadas para asumir el caso, podrían ser algunas excepciones, pero no deberían constituir la regla.
2. La idea de permitir la presencia de familiares durante la RCP
La presencia puede ayudar a la aceptación de resultados fatales a comprender que los profesionales médicos hicieron todo lo posible, a enfrentar la muerte y poder despedirse, en concordancia con las guías internacionales de reanimación que en el acápite de aspectos éticos promueven que las familias estén presentes durante la RCP.
3. El ejercicio médico en la República Dominicana
Esta aún no constituye una práctica obligatoria, sin embargo, considerar involucrar a los familiares, brindando la opción de quedarse si alguien desea mantenerse en el área mientras el personal realiza su trabajo, sería el primer paso a la integración de una medicina más humanizada y participativa.