A uno de los más grandes pensadores y filósofos de la humanidad, Immanuel Kant, se le atribuye identificar en la ingratitud la esencia de la vileza. Evitando corromper mi corazón, utilizo este espacio para, a propósito del reconocimiento periodista destacada 2022 que me hizo la Asociación Dominicana de Exportadores (ADOEXPO), en el marco de sus premios a la Excelencia Exportadora, compartir este honor con quienes se lo merecen.
Inicio con ADOEXPO, una entidad que siempre he admirado por su capacidad de trabajo y resiliencia, logrando en sus 50 años de existencia, RD ocupe el número 16 entre países con mayor crecimiento de exportaciones en el mundo y que a nivel local, 1 de cada 5 empleos esté vinculado al sector exportador.
De mi lado, no recibo este reconocimiento en nombre propio. Lo comparto con las mujeres y la juventud dominicana, porque el país, el sector de las exportaciones y el periodismo están llenos de mujeres y jóvenes que trabajan duro todos los días para que esta nación avance.
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Para muestra dos botones: me entrega este reconocimiento una Junta Directiva presidida por una mujer, Elizabeth Mena, en una ceremonia donde la máxima autoridad gubernamental era una mujer, la vicepresidenta Raquel Peña, y el mismo día que otra mujer, Biviana Ribeiro, directora de ProDominicana, compartía el dato, en el “Encuentro Nacional de Mujeres en Exportación”, que la cantidad de empresas exportadoras dirigidas por mujeres aumentaron 12.4 %.
Pero, además de las mujeres y jóvenes, este premio tiene otros nombres propios. Se trata de buenas personas y excelentes periodistas, quienes me dieron esa primera oportunidad que para la juventud y las mujeres es clave.
Xiomarita Pérez, quien me conoció en la UASD y me recomendó para una vacante en el Periódico HOY.
Jacqueline Ventura, mi primera jefa, quien lejos de retenerme, pegó un pedazo de sus alas a mis sueños para que yo volara con más fuerza. A Bienvenido Álvarez Vega, quien creyó en mí antes que yo misma, y quien me ha dado los consejos profesionales más importantes de mi carrera.
A Juan Bolívar Díaz y a Adalberto Grullón. Ambos, con su lucha a favor de la democracia, son mi referente de periodismo con compromiso social.
A mi familia, especialmente mi madre, doña Juana, y mi esposo, Sahel Abreu, dos pies de apoyo para el equilibrio entre mi vida personal y profesional.
A tres compañeros de trabajo que me ayudan a aligerar la carga: Stalin Montero, Jolie Ventura y Jenniffer Peguero.
A la Junta Directiva de Adoexpo y su presidenta, al Jurado de este premio y demás galardonados.
A mi mentor: Carlos Pimentel Rivera.
En fin…este reconocimiento tiene muchos dueños y dueñas y quiero que quede esta constancia pública
de mi agradecimiento, admiración y cariño hacia ellos y ellas.