Kyiv (Ukraine), 03/01/2023.- Volunteers clean debris at the site of a Russian missile attack that occured on 31 December 2022 in Kyiv, Ukraine, 03 January 2023. Russian missiles targeted major cities across Ukraine on 31 December prior to the New Year celebration. Russian troops entered Ukraine on 24 February 2022 starting a conflict that has provoked destruction and a humanitarian crisis. (Atentado, Rusia, Ucrania) EFE/EPA/MIKHAIL PALINCHAK
La cúpula militar de Rusia estaba ayer bajo un fuerte escrutinio luego de que se dieron a conocer más detalles de cómo al menos 89 soldados rusos, y posiblemente muchos más, murieron en un ataque de artillería ucraniano contra un solo edificio.
Las circunstancias en las que se perpetró el ataque del fin de semana pasado en la localidad ucraniana de Makiivka, que está bajo control ruso y donde se encontraban estacionados los soldados, parecen haber sido una fórmula para el desastre. Al parecer, cientos de soldados rusos estaban agrupados en un edificio cercano a la línea de frente, al alcance de la artillería del enemigo, posiblemente cerca de un almacén de municiones y tal vez ayudando involuntariamente a las fuerzas de Kiev a apuntar hacia ellos.
Fue uno de los ataques más mortíferos contra las fuerzas del Kremlin desde que empezó la guerra que en febrero cumplirá un año, y la cifra de muertos más alta provocada por un solo incidente que es reconocida por alguna de las partes en el conflicto.
Las fuerzas armadas de Ucrania afirmaron que el ataque en Makiivka causó la muerte de unos 400 soldados rusos que se encontraban en un edificio escolar. Alrededor de 300 más resultaron heridos, de acuerdo con los oficiales castrenses.
Le invitamos a leer: Joe Biden planea visitar por primera vez la frontera con México
De momento no fue posible verificar las declaraciones de las partes debido a los combates. El ejército ruso trató de culpar a los soldados por sus propias muertes.
El teniente general Sergei Sevryukov dijo en un comunicado emitido el martes por la noche que la señal de sus teléfonos permitió a las fuerzas de Kiev “determinar las coordenadas de la ubicación del personal militar” y lanzar un ataque.
Emily Ferris, investigadora de Rusia y Eurasia en el Royal United Services Institute de Londres, comentó a AP que es “muy difícil verificar” si las señales telefónicas y la geolocalización fueron las culpables del ataque certero. Señaló que los soldados rusos en servicio tienen prohibido utilizar sus teléfonos.