De Ramón cita entre las causas el bajo nivel salarial la estructura impositiva e ineficiencia estatal en redistribución del ingreso

La economía de República Dominicana crece, pero ¿se siente el bienestar?, es la pregunta que hace el economista José Luis De Ramón, quien destaca que en el país la mayoría de las personas se quejan de que a ellos no les toca nada y domina el sentimiento de insatisfacción.

Para explicar esta situación, destaca que aunque la economía dominicana ha mejorado sustancialmente, existen muchas carencias básicas de las personas, principalmente en educación y salud.

Y afirma que el que no se sienta el bienestar se puede explicar por tres causas principales: el bajo nivel salarial de RD, la estructura impositiva y porque el Estado no es eficiente en la redistribución del ingreso.

“Sí es importante el crecimiento. Sin recursos no se puede hacer nada, pero se deben romper las barreras reales que evitan que la sociedad avance. Falta de sentimiento de bienestar. El logro social alcanzado por RD es mucho menor que el esperado”, dijo el economista De Ramón.

Expuso que entre los atraso se evidencian la desigualdad de ingresos, embarazo adolescente, pensiones, escolaridad promedio, desempleo en jóvenes, tasa de homicidios y consecuentemente. “Con todos estos problemas, la gente se puede sentir mejor con mayor ingreso, pero no se va a sentir bien. Pero no es lo mismo estar mejor que estar bien, porque seguimos siendo muy pobres si se compara el PIB per cápita de RD con los países tigres asiáticos”, dijo.

Expuso que si se descompone el Índice de Desarrollo Humano (IDH) por criterio al 2021, el aumento fue de un 8 %, y esto se debe en un 15 % a educación, 7 % ingreso y solo un 1 % a salud.

Una mejor salud se convierte en expectativa de vida, pero en los últimos 10 años esta aumentó cinco meses ubicándose en 72.61 años y está por debajo de su potencial según el PIB per cápita. Mientras en Costa Rica tiene 79.5 años y Tailandia 78.7 años, con PIB per cápita similar.

Explica que la mejora en la educación en el IDH se explica a partir de dos variables: expectativa de escolaridad y promedio de escolaridad. Ambas han mejorado, pero esto no han afectado el desempeño escolar pues en las prueba PISA no hay mejoras importantes.