El Real Madrid se proclamó campeón mundial de clubes por quinta vez en su historia al derrotar en la prórroga a Kashima Antlers por 4-2, gracias sobre todo a un triplete de su estrella Cristiano Ronaldo, ayer en Yokohama (Japón).
El campeón de Europa se adelantó con un gol de Karim Benzema (9), pero Kashima le dio la vuelta al marcador con dos tantos de Goku Shibasaki (44 y 52), antes de que Ronaldo, elegido el mejor del partido, empatase de penal (60) y sentenciase en el tiempo extra (98 y 104). Con este título, el Real Madrid se convierte en el primer club en levantar cinco veces el trofeo de campeón del mundo, tras las Copas Intercontinentales de 1960, 1998 y 2002 y el Mundial de Clubes logrado hace dos años en Marruecos. El equipo japonés arrancó con mucho ímpetu, pero el equipo español golpeó en la primera ocasión de verdadero peligro del partido: Luka Modric empalmó un duro disparo desde la frontal que paró Hitoshi Sogahata, pero el rechace le quedó manso a Benzema para que, como pasó ante América, el francés abriera el marcador (9).
Con el gol, además, el Real Madrid se acomodó, pensando que lo más difícil ya estaba hecho. Abusaba del juego horizontal, sin profundidad, salvo un par de disparos de Modric y Benzema, y dio la oportunidad a los japoneses de seguir vivos en el partido.
Y la sorpresa llegó justo antes de la pausa, cuando un centro de Shoma Doi desde la izquierda no logró ser despejado por la defensa blanca y Shibasaki batió a Keylor Navas (44).
El Real Madrid no reaccionó en el inicio de la segunda parte y los japoneses no renunciaron a nada. Así llegó el segundo de los locales, en un disparo desde la frontal de Shibasaki que se coló pegado al palo del arco de Navas (52).
Shibasaki golpea dos veces. Ese segundo gol despertó finalmente al campeón de Europa, que empató con un gol de penal cometido sobre Lucas Vázquez que transformó Cristiano Ronaldo (60). Tras el empate, el Real Madrid se volcó sobre el arco japonés y de nuevo Ronaldo y Ramos en dos jugadas consecutivas (61) y Marcelo (65) podrían haber roto el empate. Después lo intentaron Benzema, en un remate a la media vuelta que paró Sogahata (73) y Ronaldo, primero en un cabezazo desviado (80) y después en un mano a mano que el portero sacó.