Los jueces del Segundo Tribunal Colegiado de San Francisco de Macorís recesó para el próximo 4 de octubre, a las 10:00 de la mañana, el juicio que se le sigue a Marlin Martínez y a su hijo Marlon, este último acusado del asesinato de la adolescente en estado de embarazo Emely Peguero.
La decisión fue tomada por acuerdo entre las partes y a los fines de que los representantes del Ministerio Público continúen con la presentación de las pruebas que supuestamente comprometen a Marlon con el asesinato.
Durante la audiencia, Marlon narró su versión sobre cómo ocurrieron los hechos en que resultó muerta su novia, y concluyó que quiere que se haga justicia conforme a lo que establece la ley, «y no como quiere todo el mundo».
El abogado Ricardo Reyna, representante de Marlon, cuestionó las pruebas presentadas por el Ministerio Público, tras indicar la pastilla que encontraron supuestamente en un vehículo, «no pudieron encontrarle nada», «ni tampoco le hicieron pruebas al vehículo».
Reyna dijo que se trató de un aborto, como el imputado narró que ocurrió, y que los golpes que determinó el peritaje que se realizó al cadáver ocurrieron después del aborto, al cargar el cuerpo.
«Es que esos golpes ocurrieron después del aborto, al cargarla, al llevarla, al moverla. Vuelvo y repito, el Ministerio Público es que tiene que probar cómo ocurrieron esos golpes, y no lo prueba», dijo tras indicar que Marlon no tiene que probar los golpes que recibió la víctima, sino el Ministerio Público.
Aseguró que el acusado ha dicho la misma versión siempre, en relación que Peguero se tomó una pastilla y que producto de la misma se produjo un aborto.
Pampers y leche. En tanto que Ingrid Hidalgo, abogada de la madre de Marlon, Marlin Maríntez, dijo que su representada lo único que le dijo a su hijo fue que ella lo que podría darle era pampers y leche, y que él que resolviera como hombre.