El rector de la Universidad Eugenio María de Hostos (Uniremhos), ingeniero Wady Ramírez, consideró que el momento es propicio para que la comunidad educativa nacional retome los postulados de la pedagogía hostosiana que está fundamentada en los principios y los valores que promovió el insigne educador, haciéndose énfasis en la enseñanza de la moral y la cívica.

El funcionario universitario pronunció un discurso ayer en el Altar de la Patria mientras depositaba una ofrenda floral, en la conmemoración del 181 aniversario nacimiento de Eugenio María de Hostos, el 11 de enero de 1839, en Mayagüez, Puerto Rico.

Ramírez estuvo acompañado de Yokasta Mañón, vicerrectora administrativa de Uniremhos; Fátima Hernández, vicerrectora académica y Elba Báez, coordinadora académica.

“Nuestra academia rinde este homenaje a Hostos para reconocer y agradecer sus grandes aportes a la educación dominicana”, señaló el académico.

Resaltó la labor de la institución que dirige de inculcar entre sus miles de estudiantes los humanos, patrióticos y morales que debe exhibir todo profesional.

“Hacemos este homenaje con la esperanza de que la sociedad dominicana se una en el rescate de los valores que fomentan el trabajo, la laboriosidad, el respeto, la autoridad, para que podamos tener la República Dominicana que todos soñamos”, expresó.

Agregó que “la sociedad dominicana debe saber que la educación es la principal herramienta responsable del desarrollo de los pueblos, de formar cuidamos capaces de aportar a la patria y a sus comunidades”.

Hostos fue un intelectual profesor, filósofo, sociólogo y escritor puertorriqueño que llegó a República Dominicana en 1879, donde implantó una nueva pedagogía en la enseñanza, dirigida a formar «seres humanos completos», con una visión científica y ética, capaces de construir países de sociedades libres.

En 1880 fundó en Santo Domingo la primera Escuela Normal y un año después, una institución similar en Santiago de los Caballeros, de las cuales salieron los `primeros maestros normalistas.

Eugenio María de Hostos murió en República Dominicana el 11 de agosto de 1903, a los 64 años de edad y sus restos se encuentran en el Panteón Nacional. A la hora de su muerte era director general de Enseñanza del país y de la Escuela Normal de Santo Domingo.