Desde las intervenciones militares estadounidenses al país y la advertencia de riesgos de la democracia de Pompeo hasta la valoración de Biden de la lucha contra la corrupción.
Técnicamente, las relaciones entre Estados Unidos y la República Dominicana iniciaron con la fundación del país en 1844 pasando por un proceso de cooperación bilateral y tensiones entre ambas naciones por la influencia de la potencia extranjera en la región.
En un repaso rápido por la historia en común, resaltan momentos como las intervenciones norteamericanas de 1916 a 1924, cuya principal causa fue económica, y la de 1965 ocasión en la que los Estados Unidos alegaron que buscaban evitar «Una segunda Cuba».
Además, en una época más reciente, a principios de la década del 2000, República Dominicana busca formar parte del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Centroamérica (DR-CAFTA), mismo que amenaza con desestabilizar el sector arrocero del país en dos años, manteniendo el fomento hasta la actualidad con el socio comercial más importante de la nación criolla.
Pero, para 2018 la tensión se volvió a apoderar de la relación entre ambos países cuando la República Dominicana estableció de manera oficial relaciones diplomáticas con la República Popular de China país contrario a los intereses de Estados Unidos.
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Un año después en 2019, las tensas relaciones entre ambos países se vuelven más difíciles cuando el secretario de Estado de los Estados Unidos Michael «Mike» Pompeo se comunicó con el entonces presidente de la República, Danilo Medina, para advertirle sobre los «Riesgos para la democracia» de una eventual modificación a la Constitución dominicana en momentos en los que se hablaba de una posible reelección de Medina. Muchos aseguran que esa llamada de Pompeo cambió el curso de la historia reciente del país.
Tras la conversación telefónica, el presidente Medina anunció al país que no buscaría la reelección y que daría paso a los denominados «Delfines» en busca de un nuevo candidato presidencial.
No obstante, las relaciones entre ambos países se mantuvo siempre en el marco de la camaradería y cooperación.
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Luis Abinader y Estados Unidos
Una de las primeras acciones del presidente, Luis Abinader, fue redefinir la política exterior de la nación respecto a Estados Unidos, que según expertos en política internacional se habían dejado de lado en los últimos años del gobierno de Medina. Abinader anunció la firma de nuevos acuerdos de cooperación internacional y la extensión de los tratados activos en ese momento dándole así mayor importancia a la interacción bilateral.
El gobierno de Abinader se ha caracterizado por sus buenas relaciones con los Estados Unidos, sobre todo, con la creación del master plan de Manzanillo que desarrollo un equipo compuesto por planificadores, arquitectos paisajistas, ingenieros y economistas del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos, y el equipo de arquitectura e ingeniería de Alliance WSP Joint Venture.
Se recuerda que el puerto de Manzanillo era un lugar de alto interés de desarrollo y explotación de los gobiernos de Estados Unidos y China.
El Gobierno de los Estados Unidos, especialmente la administración del presidente Joe Biden, ha destinado millones de dólares en apoyo a iniciativas que fomenten la democracia, la institucionalidad y el desarrollo social de países en América Latina, incluida la República Dominicana.
Recientemente, Biden anunció que su gobierno destinará al menos 690 millones de dólares en programas de democracia apoyando medios de comunicación hasta elecciones libres y justas. Además, Biden valoró positivamente los esfuerzos de gobiernos como los del presidente Luis Abinader y sus medidas para enfrentar la corrupción en referencia a los procesos judiciales se se ejecutan actualmente.