El suizo Roger Federer normalizó los problemas por los que pasaron el español Rafael Nadal y él mismo durante sus encuentros de primera ronda en Wimbledon y lo achacó a los nervios del estreno.
Federer, de 37 años, busca en Wimbledon su novena corona en el All England Club y empezó su aventura hacia el vigésimo primer grande con una victoria en cuatro sets ante el sudafricano Lloyd Harris.
“No me sentí nervioso durante el día de antes, pero una vez que empieza el partido, las piernas no se mueven y las cosas no ocurren”, explicó.
“Los márgenes son estrechos. Rafa sufrió un poco al principio y yo también. Es algo que puede pasar. Esta primera semana de verdad te pone a prueba”, agregó.
El segundo cabeza de serie del torneo se cruzará con el británico e invitado local Jay Clarke en la segunda ronda y en tercera podría medirse al francés Lucas Pouille, vigésimo séptimo favorito al título. Clarke, de 20 años y número 169 del ránking se deshizo del estadounidense Noah Rubin para encontrarse por primera vez en su carrera con Federer.