Ángel Rondón afirmó ayer que más que temer por su vida y la de su familia como denunció ante el Presidente de la República, el exprocurador general Jean Alain Rodríguez lo que pretende es hacerse la víctima para que “su cuestionada, patética e infame gestión” quede en el olvido, de manera particular “su deplorable investigación en el caso Odebrecht”.

Le dijo en una carta pública que si la justicia no puede establecer culpabilidad por soborno, debe sentirse único responsable, porque rehusó las diligencias para presentar expediente serio.
“Sobre eso usted tiene cuentas con el país al que sirvió como procurador general de la República”.

El principal imputado le cuestiona porqué si siente temor por su vida o la de su familia, como abogado conocedor de la norma, en vez de acudir al presidente Luis Abinader no depositó la denuncia o querella por ante el Ministerio Público.

No lo hizo porque “de esta forma no podría dar a conocer a la opinión pública su verdadero propósito que es el de dañar, lo que le retrata como el funesto personaje que es usted”, le escribe.

Criminal peligroso. Respecto a su inclusión en la lista de criminales bajo la ley Magnitsky por ser de un alto perfil de peligrosidad, Rondón dijo que está ahí de forma injusta y lo atribuyó a gestiones del exfuncionario. “También esa acción le configura como el perverso del siglo”.

Afirmó que como cabeza del MP, más que nadie sabe que la ley estadounidense permite ejercer sanciones económicas contra violadores de derechos humanos y corruptos en países donde la ley y la justicia son fallidas, “cosa que de ningún modo se adviene a la realidad dominicana”.

¿Qué de Renove?. Sobre su supuesta vinculación con el caso Plan Renove, Rondón le recordó a Jean Alain que el juez de la instrucción dictó un No Ha Lugar en su favor.

“Usted me acusa frente al jefe del Estado de haber desfalcado ese programa y solo eso podía llevarlo a cabo quien dirigía el plan, y ese no era yo”, enfatiza.

Nada con Baninter. Con relación al caso Baninter, también le recuerda al exprocurador que ni siquiera fue interrogado para la elaboración del expediente sometido a la justicia.
Referencias que define mentirosas y reveladoras de su odio e inquina contra un ciudadano “al que está empecinado en destruir”.

Expresó que no es hombre de odio, ni rencores, que no ha tenido nunca instintos criminales, y en cambio es fiel creyente en Dios, en los valores cristianos, en la familia y por tanto creyente en la justicia divina.
“Espero en el altísimo que usted sea juzgado en la tierra o en el cielo, de mi parte duerma tranquilo, y procure que solo sus hechos le sirvan de jueces”.

LAS CLAVES

Sin rencores
“Yo reitero hoy frente a usted, frente al ciudadano Presidente de la República y frente a todo el país, que no soy un hombre de odio, que no albergo rencores, que no he sentido instintos criminales, pero que soy fiel creyente en Dios, en los valores cristianos, en la familia y por tanto creyente en la justicia divina”.