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Roberto Rosario Márquez, quien hasta ayer presidió la Junta Central Electoral (JCE), dijo que abandona el cargo con la satisfacción de haber cumplido con su deber, ya que entrega un organismo muy distinto a como lo encontró.
Indicó que desde que fue electo presidente, esa entidad ha experimentado cambios sustanciales, fruto del crecimiento institucional experimentado, lo que la ha transformado en “una verdadera institución de servicio público”.
Rosario hizo la afirmación durante el acto de toma de posesión de los nuevos miembros de la JCE, a los que dijo estar a su entera disposición.
Indicó que ha instruido al personal para que ofrezca una información detallada del funcionamiento operativo de la institución y de su situación financiera.
En ese sentido, dijo que entre las informaciones que serán ofrecidas está la referida a las deudas y compromisos económicos post-electorales que tiene el organismo.
Sobre el particular, dijo que eso no es nuevo, ya que en los años electorales la JCE queda con deudas que siempre son saldadas al años siguientes, “sobre todo con el incremento de los fondos de autogestión que en los últimos años ha tenido el organismo”.
“Quiero dar las gracias al pueblo dominicano por darme la oportunidad de servirle desde esta posición pública”, expresó Rosario Márquez, quien es sustituido en el cargo por Julio César Castaños Guzmán.
