Rusia aseguró este viernes tener nuevas pruebas, que trasladará a la ONU, de la existencia de supuestos programas de armas biológicas desarrollados en Ucrania con el apoyo de Estados Unidos, una acusación que hasta ahora no ha sido confirmada por fuentes independientes.

Moscú, que lleva semanas planteando esta cuestión ante Naciones Unidas, dijo que hoy tiene previsto remitir otra carta al Consejo de Seguridad con información adicional.

En declaraciones a los periodistas, el embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyanskiy, aseguró que entre los nuevos materiales hay documentos del Departamento de Defensa de EE.UU. y de varios ciudadanos de ese país supuestamente involucrados.

Polyanski dijo además que entre las evidencias obtenidas por el Ministerio de Defensa ruso hay mensajes que apuntan a que Ucrania consultó con un fabricante turco de drones sobre si éstos podrían usarse para diseminar sustancias desde el aire.

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El diplomático insistió en que Rusia tiene “pruebas de que las autoridades ucranianas, apoyadas y patrocinadas directamente por el Departamento de Defensa de EE.UU., estaban llevando a cabo peligrosos proyectos y experimentos como parte de un programa biológico militar».

Esas acusaciones, mientras, han sido rechazadas por Ucrania y EE.UU., y organizaciones independientes como la ONU han dicho no tener ningún indicio de la existencia de laboratorios de armas biológicas en suelo ucraniano.

La cuestión ha centrado ya dos reuniones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en las que Moscú ha advertido además de que las fuerzas ucranianas estarían preparando “provocaciones” con sustancias químicas con el fin de culpar posteriormente a Rusia, algo que hoy volvió a hacer su embajador.

Las potencias occidentales, mientras, han insistido en que el verdadero riesgo es que sea Rusia quien lleve a cabo un ataque químico de falsa bandera para tratar de atribuirlo a Ucrania.

Polyanskiy avanzó hoy que Rusia organizará el próximo 6 de abril una reunión informal del Consejo de Seguridad para tratar la amenaza de las armas biológicas, a la que prevé invitar a varios expertos en este ámbito.