Hoy 
Samaná
Este pueblo se debate entre los estragos de las lluvias y el retorno a la normalidad. En efecto, el saldo dejado por los aguaceros dibuja un cuadro desolador: derrumbe de puentes y de tierras, desbordamientos de ríos, comunidades aisladas, dificultad para el tránsito.
Tres zonas de la provincia dan una idea de la situación. En dos de ellas persisten los desbordamientos de ríos, mientras en otra se vuelve a la normalidad.
El río San Juan desbordó la presa del mismo nombre y tapó el puente con los escombros que arrastró en su crecida. Esto provocó el desplome parcial del empalme que comunica a las comunidades de El Valle, La Playa, Las Lagunas, Arroyo Seco y Loma de la Cruz.
La Defensa Civil llevó ayer raciones alimenticias a familias afectadas. Sin embargo, no todos recibieron alimentos. Según los lugareños Kennedy Echavarría, Marino Herrera y Ambrosio Aybar, el organismo pasó de largo y los ignoró.
“Ellos pasaron en vehículos con cajas, fundas, colchones y comida. Cruzaron y se fueron derecho para allá a llevar todo. Tienen que comenzar con nosotros primero”, manifestaron.
Los tres se quejan por ser ignorados y no recibir ayuda alguna, situación que atribuyen a razones políticas.
En cuanto al puente y las vías que enlazan a las comunidades, Johnny Manzueta critica a las autoridades porque, según él, desde el año pasado no han resuelto el problema.
Manzueta es el secretario general del Sindicato de Camioneros de Samaná y trabaja con Ingercomsa, una empresa contrada por Obras Públicas para reparar los caminos. No obstante, asegura que la compañía no ha podido terminar los trabajos por falta de pago.
En tanto, un aluvión de tierra, piedras y árboles tapó totalmente la vía que conduce al distrito municipal de Las Galeras, lo cual provocó un gran entaponamiento.
Ante la situación, el Ministerio de Obras Públicas tuvo que habilitar un paso provisional, merced a una retroexcavadora que acomodaba el montó de caliche vertido por unos diez camiones. El material era obtenido en una mina de Las Galeras.
Según el ingeniero Pedro Pablo Alcántara, uno de los encargados de la obra, el talud colapsó la noche del lunes, lo que impedía el paso por ese derrotero.
“Los trabajos que se están haciendo es habilitando el paso de los vehículos porque las lluvias obstaculizaron el paso, en una solución provisional, no definitiva”, detalla.
Alcántara explica que se echó una espesa capa de caliche en la vía, de manera que si continúan las lluvias, los vehículos puedan seguir transitando.
Sin embargo, insiste en que la solución es interina, hasta tanto se evalúen los daños y se ejecute un remedio definitivo. Mientras tanto, una vivienda está al borde del risco y a punto de colapsar.
Las comunidades afectadas son, entre otras, Los Bratini y Los Yagruma. Ingecompsa es la empresa contratada por Obras Públicas para desarrollar las labores.
El entaponamiento irritó a conductores que lo padecieron durante horas. Uno de ellos fue Elías García, quien se dirigía a Las Galeras. Su irritación se debió a que no es la primera vez que sucede un derrumbe. En efecto, recuerda que hace unos meses hubo un colapso en Los Escalones, cerca del lugar donde vivió ayer el tedioso tapón.
Los alrededores del malecón volvieron ayer a su normalidad, gracias a los equipos de trabajo. Dos brigadas de Obras Públicas, formadas por 28 hombres procedentes de San Pedro de Macorís, laboran sin cesar, removiendo escombros y abriendo desagües.
Su trabajo está coordinado con el cuerpo de bomberos y la dirección provincial de Medio Ambiente. Los bomberos limpiaron calles y avenidas, mientras las autoridades de Medio Ambiente desarrollaban también jornadas de limpieza.
A propósito, una representante de Medio Ambiente, Deidania Javier, explicó que las jornadas fueron divididas en tres: una para el centro de Samaná, otra para Las Terrenas y una tercera para Arroyo Barril.
En cuanto al cuerpo de bomberos, el teniente coronel Washington Kelly, segundo al mando, imploró la reparación y terminación del cuartel. Según él, falta pintarlo y construirle el segundo nivel.
