Jorge Ramos 
Por Jorge Ramos C. y Alexandra Santana
El cantautor dominicano Juan Luis Guerra suma otro triunfo a su exitosa carrera, al lograr reunir más de 40 mil personas la noche del sábado en el Estadio Olímpico de Santo Domingo con su concierto “Entre mar y palmeras”. Durante dos horas y 12 minutos, el multipremiado artista interpretó, junto a su grupo 4-40 y varios invitados, 23 canciones que fueron coreadas, bailadas y aplaudidas por el masivo público.
Entre merengue y bachata, las primeras seis canciones de la noche fueron “Rosalía”, “La travesía”, “La llave de mi corazón”, “Vale la pena”, “Como yo” y “DJ bachata”.
Como siempre, un Juan Luis de poco hablar, dio las gracias a su público con un buenas noches y una pregunta ¿Cómo la están pasando?”, para dar la bienvenida a su primer invitado: el cantautor colombiano Fonseca, en medio de la algarabía del público, con quien cantó el éxito “Si tú me quieres” (featuring).
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En seguida Guerra anunció la presencia de la nueva generación de la música: Pavel Núñez, Techy Fatule, Melymel y Alex Ferreira, para cantar el clásico “Amor de conuco”.
Para recordar los inicios de 4-40, con Maridalia Hernández y Mariela Mercado, Juan Luis interpretó el merengue “Tú”, y con Adalgisa Pantaleón “Como abeja al panal”.
Los Hermanos Rosario (Rafa, Tony y Luis) aparecieron en el imponente escenario de luces, pantallas y pirotecnia para cantar con Juan Luis el merengue “La dueña del swing”.
Con el último invitado de la noche, Vicente García, el afamado artista dominicano vocalizó la canción “Loma de cayena”.
Otras piezas ejecutadas por Juan Luis y disfrutadas por la audiencia fueron “Mambo 24”, “Las avispas”, “El farolito”, “Ojalá que llueva café”, “A pedir su mano” y “Bachata rosa”, para finalizar a las 11:42 de la noche con el merengue “La bilirrubina”.
Alejandro Fernández
El tour del cantautor Alejandro Fernández, “Amor y patria 2024 Centroamérica”, también formó parte de la cartelera musical “premium” este fin de semana en Santo Domingo.
La noche del viernes, en un espectáculo sin desperdicios, el mexicano se comportó a la altura de los Fernández durante dos horas y media de canciones en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto.
El artista complació a su auditorio con aproximadamente 30 interpretaciones nuevas y viejas, a las que le imprimió sentimiento profundo y picardía.
Artísticamente hablando, actuó como un señorón, que con 48 años de carrera y una voz privilegiada, dignificó su apellido sobre el escenario.
Como era de esperarse, su especialización en estilos tradicionales de la música regional mexicana, como el mariachi, le dieron un toque mágico a su concierto, marcado por un emotivo homenaje a su fallecido padre Vicente Fernández, así como a reconocidos compositores de su patria con impacto en su carrera y en la industria musical mundial, como es el caso del “Poeta del pueblo” Joan Sebastián, quien compuso para él el himno musical “Estuve”, uno de sus temas más populares.
Algunas piezas clásicas en balada pop y bolero también formaron parte de la entrega del tres veces ganador del Grammy Latino, convencido, por la fuerza de los múltiples aplausos y la algarabía generada, de que República Dominicana sigue siendo una de sus plazas más activas dentro de la región.
“Que seas muy feliz”, “Me dediqué a perderte”, “Nube viajera”, “Mátalas”, “Abrázame” y “Estos celos”, entre otras canciones, lo hicieron sentir que es bien querido en este país.
