El taxista que transportó a los individuos que ultimaron al teniente coronel de la Policía Nacional, Esteban de la Rosa, de 52 años, se entregó a las autoridades para responder por la acción.

Diego Pesqueira, vocero de la uniformada, se limitó a decir que el hombre, cuyo nombre se reservó, será interrogado para determinar si sólo ofreció un servicio sin saber del hecho o para conocer si tiene responsabilidad por lo ocurrido.

Según testigos, de la Rosa, quien fue baleado por desaprensivos que huían tras asaltar un colmado cercano a su vivienda, estaba sentado fuera de su residencia y al ver que los malhechores salieron huyendo del establecimiento, se levantó de su asiento e intentó sacar su arma de reglamento, por lo que la emprendieron a tiros contra él.

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El teniente coronel prestaba servicio desde hace varios años en la inspectoría de la seguridad interna de la DNCD. El presidente de la institución, vicealmirante José Manuel Cabrera Ulloa, a través del vocero de esa institución, Carlos Devers, lamentó el hecho y se solidarizó con los familiares del malogrado.

Familiares del oficial asesinado pidieron justicia por lo ocurrido y definieron al teniente como un hombre ejemplar y querido por todos sus vecinos.

Con la muerte de Esteban de la Rosa, suman dos los oficiales de la Policía Nacional que pierden la vida en esta semana a manos de delincuentes en el país.