MIAMI. Científicos secuenciaron el genoma de un hombre africano de 4.500 años de antigüedad, un desafío difícil debido a que el clima caluroso complicó la recuperación del ADN de los antiguos restos, dijeron investigadores.
El importante avance se realizó usando el cráneo de un hombre enterrado boca abajo en una cueva en unas colinas en el sur de Etiopía, según un estudio publicado en la revista especializada Science el jueves.
La cueva estaba suficientemente fresca y seca como para preservar su ADN durante miles de años, sostiene el estudio, que explica que análisis precedentes se habían limitado a muestras de regiones del norte y árticas.
Aunque el hombre murió antes de una ola migratoria de retorno a África desde el oeste de Eurasia hace aproximadamente 3.000 años, su genoma mostró que esa migración «fue más del doble de significativa de lo que se pensaba previamente, y afectó la composición genética de la población de todo el continente africano», aseguró el equipo de investigadores en un comunicado.
El fenómeno, conocido como el «retorno euroasiático», tuvo lugar cuando individuos del oeste de Eurasia, como Medio Oriente y Anatolia, inundaron súbitamente el Cuerno de África.
Al comparar su antiguo genoma con el ADN de los africanos modernos, los investigadores hallaron que las actuales poblaciones de África oriental comparten el 25% del ADN de sus ancestros euroasiáticos.
Más allá de la región, las poblaciones africanas de todo el continente pueden rastrear al menos 5% de su genoma en esa inmigración euroasiática.
Los investigadores creen que este hallazgo demuestra que la enorme ola migratoria fue mucho mayor de lo que se pensaba previamente y pudo haber representado hasta la cuarta parte de la población del Cuerno de África en la época.
«Con un antiguo genoma, tenemos una ventana directa al pasado remoto.
Un genoma de un individuo puede suministrar una imagen de una población entera», dijo Andrea Manica, del departamento de Zoología de la Universidad de Cambridge, partícipe del estudio.
«La pregunta es qué los llevó a desplazarse repentinamente», agregó. La causa de la masiva migración sigue siendo un misterio.