Es sabido que las emociones que sienten al principio de la una relación, van variando a medida que pasa el tiempo.

Cuando el enamoramiento, etapa en lo que todo es ideal, se termina puede suceder que se rompa la relación o que se transforme en en algo más sólido y el enamoramiento se transforme en «amor».

Suponiendo que pasa lo peor que se puede esperar, que la relación no tenga futuro lo normal sería terminar con la relación.

Pero para algunos no es tan fácil  tomar la decisión de ponerle fin a una relación directamente, se convierte en una tarea simplemente imposible. 

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Silencio: Dejan de preguntar cosas y contar las suyas, prefieren llamarse al silencio antes que entablar una conversación.

Desinterés: No sólo no se preocupan por los temas que conciernen a la mujer, sino que si ésta pretende contarle algo, el hombre realiza cualquier otra actividad sin prestar atención a lo que se le está comentando.

Rechazo: Una de las experiencias más feas por las que se pasa es sentirse rechazada por la pareja de uno. Él no quiere tener relaciones, ni tocarnos, prefiere tenernos bien lejois. Esto no sólo es un signo importante de que anda algo mal en la relación sino que hiere el autoestima de la persona que se siente rechazada.

Egoísmo: Lo único que le importa son sus cosas, como salidas con amigos, deportes, trabajo. La mujer pasa a un último plano, en dónde no es tenida en cuenta sino luego de haber satisfecho todas las otras «obligaciones del hombre».

Exageran: Convierten una simple discusión en una «cuestión de estado», aprovechando la situación para apartarse, recriminar cosas y realizar la actividad que realmente tiene ganas.

Descuidos: Pasan a tomar menos recaudos en las cuestiones que no quieren que se enteren sus mujeres. Si antes eran prolijos, ahora van a dejar rastros por todos lados, esperando (aunque sea inconscientemente) ser descubiertos.

Lo que buscan los hombres es que las mujeres se cansen y los dejen. No es conveniente seguir adelante con la relación sólo para no darles el gusto, y verles la cara cuando tengan que tomar la decisión de cortar la relación.

No sólo no vas a saber cuánto tiempo vas a perder esperando esta decisión sino que estar en otras condiciones podría convertirse en una agonía.

La agonía de la pareja puede llevar a resultados muy desagradables como el odio. Por eso lo aconsejable es terminar con la relación antes de que sea demasiado tarde.

Resultado: Una termina enterándose y mandando todo a la basura?. Hacer un intento de prolongar la relación cuando está en estas condiciones podría convertirse en una agonía.

Y la agonía en el amor es muy desagradable y puede llevarnos a detestar al otro, lo cual es insano y doloroso para ambas partes.

Cuando el desamor llega, nunca ocurre a los dos miembros a la vez, lo mejor es separarse y tratar de convertir la relación en amistad.