Es de todos sabido que en este país la oposición se opone a todo lo que haga o diga el Gobierno de turno, y de ahí la pobreza que exhibe el debate electoral y el exiguo aporte de los políticos a las soluciones de los grandes males nacionales, de los que son en gran parte responsables por acción u omisión porque son los que gobiernan y administran el Estado.
Pero lo mucho, como dicen por ahí, hasta Dios lo ve, y eso vale tanto para lo bueno como para lo malo, por lo que hay cosas que, por más opositor al Gobierno que usted sea, no puede dejar de reconocer si no quiere parecerse al peor de los ciegos o al necio que de tanto serlo provoca rechazo con sus necedades.
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Es lo que ha hecho el senador de Pedernales por la Fuerza del Pueblo, Dionis Sánchez, al felicitar al presidente Luis Abinader por la llegada del primer crucero al reconstruido puerto de Cabo Rojo, que calificó de “inédito”, y el desarrollo que llevará a la empobrecida región sur.
“Quiero reiterar las felicitaciones al Presidente de la República, y digo reiterar porque lo he dicho muchas veces; porque aunque mi actividad es responsable, frontal, directa, honesta, no es razón para que no tenga capacidad de reconocer y felicitar”.
Lamentablemente, esa capacidad de reconocer lo que está bien hecho, pero sobre todo lo que beneficia a la población en sentido general aunque sea obra del Gobierno del partido al que usted no pertenece o simpatiza, es muy escasa en nuestros políticos, incapaces en su mayoría de ver más allá de sus intereses partidarios o personales.
Por eso fueron noticia las declaraciones del senador de Pedernales, que simplemente apeló al sentido común para decir lo que dijo, pues si se pronuncia contra la llegada de ese crucero, de lo que significa para el despegue del turismo en la región y el impacto positivo que tendrá en su gente, que se olvide de volver a ser senador o de aspirar a cualquier otro cargo que necesite los votos de los pedernalenses.