Dentro de la agenda legislativa que tiene la senadora del Distrito Nacional, Faride Raful, está el someter un proyecto de ley cuyo propósito es regular el uso de leches maternas de fórmula en todo el sistema de salud: clínicas y hospitales.
«Porque nuestras madres cuando van a dar a luz, nuestros bebés son inmediatamente iniciados en su vida alimenticia con fórmulas en vez de estimular la lactancia materna», señaló la congresista.
Raful, que fue entrevistada durante el Encuentro Digital de Hoy, detalló que se necesita un criterio específico para cuando un infante necesite ese alimento que no sea recurrir en primera instancia a ese tipo de leche.
La senadora señaló, sin embargo, que pudieran existir situaciones por las que esté atravesando la madre al momento de alumbrar a su criatura que le impida lactar, pero la fórmula no debería ser «lo primero que se le suministre al infante sin previa consulta de un médico».
La legisladora consideró también que la práctica de la fórmula, que también es conocida como preparado para lactante, se ha convertido en un «gran negocio» en el sistema de salud dominicano. Es por eso que dicho proyecto de ley busca, además, que los bebés cuenten con una buena calidad del citado producto lácteo, que le representará beneficios a su salud a corto y largo plazo.
«No hay mejor manera de prevenir una calidad de vida de los niños que no sea a través de la lactancia materna, siempre y cuando se pueda hacer. Eso es parte de los proyectos que hemos estado trabajando», dijo la senadora.
En abril del año 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un segundo informe de una serie que detalla las prácticas de comercialización que consideró «abusivas» empleadas por la industria de los preparados para lactantes, un sector valorado en 55 mil millones de dólares, que muestra cómo los padres, y sobre todo las madres, son perseguidos en línea de manera insidiosa y persistente.
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«Las empresas de preparados para lactantes pagan a las plataformas de redes sociales y a personas influyentes en el ámbito de esas redes para poder acceder de manera directa a las mujeres embarazadas y las madres en algunos de los momentos de mayor vulnerabilidad de sus vidas. La industria mundial de los preparados para lactantes, valorada en alrededor de $ 55 000 millones, se dirige a las nuevas madres a través de las redes sociales con un contenido personalizado que a menudo no se identifica como publicidad», dice la OMS.