Las terapias actuales del cáncer de seno -una de las principales causa de muerte por cáncer entre las mujeres- ha evolucionado hasta convertirse en un tratamiento multidisciplinario, cuyo éxito depende de las estrategias médicas y quirúrgicas que utilicen especialistas que intervienen en el proceso.
Esto, según explica la doctora Jane Méndez, jefa de Cirugía del Seno de Miami Cáncer Institute, que forma parte de Baptist Health South Florida, es lo que ha logrado que hoy en día el cáncer de seno en etapa uno tenga una tasa de supervivencia de hasta el 99%, en 10 años.
La especialista aclara que no todo cáncer de seno requiere el mismo trato. Y es que cuando se habla de cáncer de mama las curas más conocidas son la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia. Sin embargo, explica que no todas las pacientes necesitan el mismo protocolo médico.
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“Antes de decidir un tratamiento hay que realizar un evaluación completa y verificar que la persona no tenga otra patología. ¿Para qué voy a usar quimioterapia en alguien que no la necesita”, explica.
De igual manera explica que no todos los cánceres de seno son iguales. “Hay muchos subtipos de cáncer de seno a los que podemos dirigirnos con un tratamiento personalizado, porque hoy conocemos mejor la biología y lo que funciona”, dice Méndez.
“Por ejemplo, si tiene un tumor que responde al estrógeno y a la progesterona, sé que podemos prescribir una terapia endocrina. Sin embargo, si su cáncer de seno es triple negativo, lo que significa que es negativo para los receptores de estrógeno, los receptores de progesterona y el exceso de proteína HER2, eso no le va a ayudar de ninguna manera”, dice la doctora.
Un enfoque de conjunto
Ver el cáncer de seno desde diferentes ramas de la medicina también ha influido en el éxito de las terapias.
En este sentido, la médica del Miami Cancer Institute valora el enfoque multidisciplinar que usan y que reúne a una amplia gama de especialistas para adaptar la atención y ofrecer una experiencia excepcional al paciente, combinando la experiencia y los conocimientos de oncólogos médicos, hematólogos, oncólogos radioterápicos, oncólogos quirúrgicos, genetistas médicos, oncólogos de rehabilitación, especialistas en reconstrucción de seno y muchos otros.
“Cada uno de ellos aprovecha los puntos fuertes de los demás. Los pacientes son acogidos en un entorno impulsado por la ciencia, pero también con sentido humano”.
La doctora Jane Méndez, junto al doctor Rogelio Ribas, habló en el país sobre la efectividad de la terapia de protones, que utilizan en Miami Cancer Institute, parte de Baptist Health South Florida.
“Al usar la terapia de protones tenemos la capacidad de impedir que el tumor continúe creciendo y llegue a una metástasis; también que el paciente lleve adelante una vida normal sin los efectos secundarios de la radioterapia convencional”, asegura.
¿Qué es la terapia de protones?
La terapia de protones es una forma avanzada de radioterapia que emplea protones de alta energía para tratar tumores. A diferencia de la radioterapia tradicional, que utiliza rayos X, la terapia de protones emplea haces de partículas llamadas protones para administrar dosis de radiación a las células cancerosas. Puesto que los protones se detienen por completo dentro del tumor, la dosis específica de radiación se aplica exclusivamente al tumor sin afectar el tejido sano que lo rodea.
Por lo general, el paciente recibirá la terapia de protones de forma ambulatoria y no tendrá que pasar la noche en el hospital. La cantidad de sesiones de tratamiento variará dependiendo del tipo y el estadio del cáncer.
Igualmente destacaron que el Miami Cancer Institute es líder en la terapia de protones en el sur de Florida y combina una atención personalizada.