La red social china TikTok presentó este miércoles una petición ante la Justicia de EE.UU. para que esta impida que la orden ejecutiva emitida por el presidente estadounidense, Donald Trump, surta efecto y la aplicación quede prohibida en el país.
La popular plataforma, propiedad de ByteDance, presentó la petición ante el juez de distrito Carl J. Nichols de Washington DC, y en ella alegó que una prohibición de estas características atentaría contra la libertad de expresión y se saltaría el debido proceso.
En la documentación entregada al juez, la firma pidió que este resuelva antes de la medianoche del domingo, el nuevo plazo para una potencial prohibición tras la extensión decretada por el propio Trump el fin de semana pasado después de aprobar preliminarmente el acuerdo alcanzado entre ByteDance y las estadounidenses Oracle y Walmart.
Si el juez no accede a la petición y no se produce ninguna novedad entre hoy y el domingo, Google y Apple, que controlan las dos principales tiendas virtuales para móviles, se verían forzadas a retirar TikTok de las mismas en EE.UU. en cumplimiento de la orden presidencial.
El lunes, Trump ya amenazó con no aprobar de forma definitiva el acuerdo alcanzado entre Oracle y Walmart con ByteDance sobre TikTok si las empresas estadounidenses no tienen un «control total» sobre la sociedad resultante, pese a haber dado anteriormente su visto bueno de forma preliminar.
Las dos partes del acuerdo -estadounidense y china- han ofrecido versiones contradictorias durante los últimos días acerca de si ByteDance seguiría formando parte principal del accionariado de la nueva compañía que se cree para gestionar el negocio de TikTok en EE.UU.
Según la versión de Oracle y Walmart -que controlarán el 20 % de la futura firma-, la mayor parte de la nueva empresa será de propiedad estadounidense, pero según ByteDance, ellos controlarán el 80 % restante hasta que tenga lugar su salida a bolsa con una oferta pública inicial dentro de aproximadamente un año.
La versión del acuerdo ofrecida por ByteDance, por tanto, no satisfaría las condiciones de la orden ejecutiva emitida por Trump el 14 de agosto, que forzó la operación al exigir que la empresa china vendiese su negocio en EE.UU. o dejase de operar en el país.