Una tormenta con granizo del tamaño de pelotas de golf cayó sobre los asistentes a un concierto en el Red Rocks Amphitheatre cerca de Denver, lastimó a decenas de espectadores y obligó a cancelar la actuación del artista principal, Louis Tomlinson, excantante de la banda One Direction.
Unas 90 personas recibieron auxilios por las heridas causadas por la tormenta del miércoles por la noche y siete fueron hospitalizadas, pero en ningún caso corrían peligro sus vidas, informó el servicio de rescate West Metro. Las lesiones, causadas por el granizo o en el intento de huir de la tormenta, consistieron en laceraciones, magulladuras y algunos huesos rotos, dijo la vocera Ronda Scholting el jueves.
El granizo se acumuló como nieve en algunos lugares del anfiteatro. El espectáculo fue demorado inicialmente debido al mal tiempo y se dijo a los espectadores que se refugiaran en sus vehículos, según tuits del teatro, tallado en roca sedimentaria en una ladera. Posteriormente fue cancelado.
Beth Nabi, de 44 años, había llegado en avión desde Irlanda para ver a uno de sus músicos favoritos. Alrededor de las 7.15 de la tarde, dijo, se veían relámpagos a la distancia. A medida que empeoraba el tiempo, se pidió a los espectadores que buscaran refugio, pero Nabi se quedó con la esperanza de ver a Tomlinson. Dijo que empezó a granizar cuando ella estaba en un retrete, el que se llenó rápidamente de gente.
“Salí del retrete y encontré el baño lleno de gente hasta el tope, todos buscando refugio del granizo”, dijo.
La tormenta duró unos 10 minutos, y cuando salió vio todo el suelo cubierto de granizo.
“La tormenta fue una locura. Fue apocalíptica. Fue rápida”, dijo.
Para colmo, al regresar a su auto rentado halló que tenía el parabrisas con rajaduras y abolladuras en la cubierta del motor.
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