La venta de drogas en barrios pobres, el tráfico de madera de guaconejo, manzanilla y carbón, así como el robo de ganado representan los mayores problemas de seguridad en Pedernales, según la investigación “Fragilidad, resiliencia, desarrollo e inversión de la zona fronteriza” del Instituto de Educación Superior en Formación Diplomática y Consular del Ministerio de Relaciones Exteriores y el Instituto Superior para la Defensa del Ministerio de la Defensa.
La venta de drogas como cocaína y marihuana es mayor en los barrios más pobres, donde existe el desempleo y una limitada presencia de agentes de la Policía y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
La cocaína es transportada desde Barahona por la carretera principal. Mientras que la marihuana llega desde Haití, tanto para el consumo local o para ser llevada a otros puntos del país. A nivel macro el territorio de Pedernales es usado para la entrada de grandes cantidades de drogas, especialmente cocaína desde Suramérica, principalmente. Son transportadas por vía área con avionetas y marítima con lanchas rápidas.
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En cuanto al guaconejo se tala y corta principalmente en la Sierra de Bahoruco y es transportado en camiones y motores hacia la línea fronteriza, utilizando las zonas de Las Mercedes y Aguas Negras. Al llegar a Haití el árbol es exportado a Francia para ser usado por la industria del perfume.
Mientras que el tráfico de manzanilla se realiza a través del corte indiscriminado de la hoja y es transportado en camiones hacia la ciudad de Santo Domingo. El carbón se trafica similar al guaconejo en motores y animales de carga. La tala y quema se realizan en diversos territorios fronterizos.
“El trafico de drogas, del guaconejo, de la manzanilla y del carbón se da en pedernales, utilizando diversas rutas y a través de la creación de una serie de asociaciones en el ámbito del crimen organizado, que permiten el movimiento y la comercialización de esos”, indica el estudio.
Expone que la frontera con Haití es muy porosa y presenta muchos puntos de vulnerabilidad que permiten que el contrabando pueda ocurrir con impunidad.
En torno al robo de ganado este afecta principalmente a los habitantes de la zona rural, lo cual ha traído muchos conflictos en la frontera, ya que los cuatreros involucrados son de origen haitiano, pero actúan en complicidad con dominicanos.
El estudio recomienda avanzar en las obras de seguridad, aumentar la vigilancia, someter a la justicia los infractores, así como realizar campañas de concientización sobre la importancia del medio ambiente y contra el uso de drogas.