El mayor turoperador ruso en el Caribe, Anex Tour, inició este jueves las obras del que será el mayor hotel de la República Dominicana, un complejo de 7.000 habitaciones que se ubicará en Punta Cana, en el este del país.

Las obras se concluirán en un plazo de cinco años y, en una primera fase, se edificarán 500 habitaciones, según anunciaron los responsables del proyecto durante una ceremonia encabezada por el presidente dominicano, Danilo Medina.

El ministro de Turismo, Francisco Javier García, afirmó en la ceremonia que este proyecto, que tendrá la marca Selectum Luxury Resort, supone la mayor inversión en el sector turístico de la historia del país, aunque no aportó cifras.

“Este proyecto que hoy se inicia es sin lugar a dudas el proyecto de inversión más grande que se ha hecho en la historia turística de la República Dominicana”, dijo García. El complejo estará ubicado en la playa de Macao, una zona prácticamente virgen al norte de la playa de Bávaro, zona en la que se sitúan los principales hoteles de Punta Cana.

El nuevo hotel se construirá alrededor de un pequeño hotel de lujo de nueve habitaciones que ya opera el grupo Anex Tour en la playa de Macao, llamado Selectum Secret Macao. El presidente de Anex Tour, el turco Neset Kockar, afirmó que el nuevo hotel “contribuirá a incrementar la entrada de turistas” a la República Dominicana, según palabras recogidas por el Ministerio de Turismo.

“Estamos seguros de que el nuevo hotel contribuirá a incrementar la entrada de turistas a este hermosísimo país, uno de los destinos más espectaculares del mundo”, señaló Kockar.

Anex Tour también es dueño de la aerolínea Azur, que opera vuelos desde varias ciudades rusas hacia la República Dominicana. Rusia es el tercer emisor de turistas que recalan en República Dominicana, con 217.082 viajeros en 2019, cifra que sitúa al país europeo solo por detrás de Estados Unidos y Canadá en la lista de principales mercados para el país caribeño.

El año pasado fue malo para el turismo en la República Dominicana, puesto que se registró un descenso del 4,6 % de la llegada de viajeros extranjeros.

La principal causa que explica este descenso fue la divulgación de noticias negativas acerca de la muerte de varios turistas estadounidenses en los hoteles del país, lo que repercutió de forma muy negativa en Estados Unidos, el principal mercado para el país caribeño.