El Presidente Luis Abinader, en la rendición de cuentas ante la reunión de las Cámaras Legislativas, se explayó en un discurso extenso, presentando lo que a su juicio han sido los múltiples logros de su gestión, lógicamente analizar en el marco de un artículo tan dilatada exposición requiere de una cirugía para abordar unos pocos temas.

En el ámbito macroeconómico no se pueden regatear logros como el crecimiento del PIB, reservas internacionales récord, aumento de la inversión extranjera. El Presidente vuelve a caer en un error metodológico cuando pondera la caída de la deuda consolidada en relación al PIB, partiendo de un año donde la economía decreció, cuando la realidad es que entre diciembre de 2020 y 2022 la deuda del Sector Publico No Financiero aumentó de US$44,622.3 millones a US$51,854.5 millones(16.2%),

En cuanto a la inflación decir que es más baja en relación a varios países, no mitiga el hecho de que en un año (enero 2023-2022) los precios de los bienes de la canasta básica hayan experimento alzas mucho mayor a la inflación y tampoco es argumento de las libras de pollo que compraba el salario mínimo de 2011, cuando hoy el mayor salario mínimo(RD$21,000) no compra la canasta del primer quintil que asciende a RD$25 mil.

Es de elogiar la conclusión de obras heredadas de los gobiernos anteriores, el inicio de nuevas y las promesas de otras, aunque corra el riesgo de no concluirlas y le pasen factura por ello.

Tiene razones para “sacar pecho” el Presidente Abinader con la recuperación del Turismo, el crecimiento de las zonas francas y el industrial, pero no se ha partido de cero, hace décadas RD es una potencia turística y el líder en zonas francas en la región.

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También hay que saludar el programa de subsidios, la preocupación por el sector arrocero ante la desgravación de las importaciones del grano desde los EEUU a partir de 2025 por el DR-CAFTA y la creación de una comisión interministerial para “que ejecuten las medidas necesarias para salvaguardar y proteger los agricultores”.

En cuanto a los logros en el sector eléctrico del Presidente omitió el aumento en las perdidas por parte de las EDES y el impacto que tendrá sobre el subsidio eléctrico la generación a gasoil.

La educación, se puede decir que los potenciales logros se podrán ver en la actual gestión del Ministro Hernández, porque mirar hacia atrás revela un año perdido por la pandemia y otro más por la cuestionada gestión del primer incumbente.

La seguridad era un tema obligado y el Presidente habló de todo lo que se está haciendo en la Policía Nacional y aunque el cuerpo del orden es una ficha en el rompecabezas de la seguridad, sus logros serán a futuro.

El tema de Haití fue tratado brillantemente por el Presidente Abinader, sin embargo, los proyectos de leyes sobre trata y trafico y el de violencia contra la mujer, que prohíben las deportaciones, representan una contradicción con el discurso; pero eso no debe ser óbice para tomarle la palabra y acudir al dialogo.

No se pueden negar logros al gobierno, ni tampoco a un discurso bien elaborado, aunque difiera de algunos datos e hipérboles, de cualquier forma la impronta del Presidente Abinader se está construyendo y su balance será medido en mayo de 2024.