Herminio, la templanza es una virtud poco cultivada por muchos de nosotros –razona Píndaro-… Requiere mantener la calma y el equilibrio en nuestro diario vivir’… “Así es –comenta Herminio-, y mucho más cuando se quiere tener un balance real en los resultados anhelados en la gestión… En nuestro país hay una institución a la que –según suena por ahí-, los departamentos encargados de planificar la captación de fondos públicos le están enfilando sus cañones para procurar una vía de captación más rápida aunque los entes que la motorizan se puedan ver afectados en el proceso”… “Diantre Herminio –expresa Píndaro-, eso nos lleva a comentarte la necesidad de que, en lugar de pensar de esa forma, utilicemos nuestro tiempo en reforzar las gestiones que cada día son reforzadas para asegurar las vías de desarrollo de proyectos que, aunque no lo creas, han movido un promedio de 250 millones de dólares cada año y, lo que más nos debe importar, impactan más allá de 26 mil personas que trabajan de forma directa, o indirectamente, en nuestra economía”… “¡Ufff! … Y, por suerte tenemos a la cabeza de la institución una profesional del derecho cuya principal virtud es, precisamente, la templanza… A la cabeza de la DGCINE, nos tranquiliza saber que la señora Marianna Vargas lleve las riendas de las actividades que, definitivamente, tienen un carácter internacional, con una actitud que siempre está abierta a resolver cualquier tipo de situación”.

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“Y, ¿has hablado con ella, Herminio?” –cuestiona Píndaro-… “Así es –le da como respuesta-, Y, te confieso que no se cómo le da el tiempo para responder en su hogar a sus dos pequeños niños y a su esposo… Ella me ha confesado que, la integración del sector privado y la receptividad de muchos entes del Gobierno que han entendido el valor del arte e industria cinematográfica, han logrado formar un buen engranaje institucional… A esto –expresa Herminio-, debemos sumar que esta exitosa gestión le ha confirmado que en nuestro país – como nos ha referido-, hay mucho más talento del que tenía presente y que no se limita a nuestra media isla”… “Pero, Herminio –exclama Píndaro-, ¿Y qué piensa ella de los contratiempos que se nos puedan enfrentar en el futuro inmediato?”… “¡Caray! Qué bien que te refieres a eso, Píndaro –comenta Herminio-… Lo que a ella le preocupa es que no se dieran las instancias de diálogo en el que todos nos hacemos inteligentes con los aportes del otro, y podamos construir soluciones comunes para todo el sector… Es importante considerar los pilares que han dado la proyección que ha alcanzado esta industria… Es fundamental que ella nos ha comentado que ‘Si hablamos desde un aspecto más técnico, si en algún momento se entiende que debemos actualizar esos pilares, al determinarse que la actividad evolucionó, debemos siempre tener en cuenta los valores originales que debemos preservar: La creación de capital humano, una infraestructura que responda a las necesidades del sector, y una institucionalidad basada en reglas estables y claras’… En este momento –expresa ahora Herminio-, es tiempo de compartir más las informaciones de los proyectos y sus datos de impacto, para así lograr sensibilizar y concienciar a la población… Recuerdo que ella nos comentó –agrega Herminio-, que hay espacios creados para facilitar el diálogo, como por ejemplo, el CIPAC, que es el Consejo Intersectorial Para la Promoción de la Actividad Cinematográfica”.

“Mientras –exclama Píndaro-, los productores de cine deben aprovechar cada día más que las puertas de la DGCINE están abiertas para ellos, su cabeza pensante aspira a seguir creciendo en una actividad que, además de ser una destacada abogada, le apasiona y le da la oportunidad de integrar equipos para enfrentar temas desafiantes… Es necesario, que la Ley de Cine sea fortalecida y no tocar –ni con el pétalo de una rosa-, aquellos mecanismos que hoy han probado con creces que promueven la imagen de nuestro país”.