Los grandes problemas requieren grandes soluciones. Pero los problemas difíciles de resolver, necesitan soluciones eficaces; y es que construir un muro en nuestra frontera con Haití, sería una solución ba$tante grande, pero… ¿sería eficaz? ¿Resolvería de una vez y por todas, nuestro problema migratorio? Hay mentes por ahí que piensan que sí.

Toda acción siempre tendrá diferentes reacciones, todo dependerá del cristal con que se mire. Por ejemplo se podría mencionar el muro de las lamentaciones en el templo de Jerusalén, el cual no fue derribado por el entonces general Tito (posteriormente emperador) para que los judíos siempre recordarán que fueron derrotados por el imperio romano (punto de vista romano); sin embargo el pueblo de Judea atribuyó que éste muro quedará intacto, a una promesa hecha por Dios, según la cual quedaría de pie al menos una parte del sagrado templo como símbolo de su amor eterno por el pueblo judío (punto de vista judío). Ahí tenemos dos puntos de vista de una misma cuestión. En el caso de nuestro muro, hay quienes aseguran que será la solución de todos nuestros males; en mi opinión pienso que sólo servirá para lamentarno$.

Por lo tanto, más que un muro físico, prefiero que haya solidaridad entre los pueblos, creación de oportunidades en la zona que compartimos con el vecino país, al cual estamos unidos para siempre mientras exista; más que un muro debemos hacer un puente donde podamos aportar al desarrollo de ese país, que ha sido víctima de los intereses de las grandes potencias en contubernio con su élite política – empresarial. Prefiero un muro lleno de esperanza; un muro solidario entre los pueblos; un muro plagado de sueños cumplidos; así lo prefiero, antes que un muro de las lamentacione$

¿Acaso no es preferible usar la tecnología que tenemos disponible? Estoy convencido que usar ubicación satelital e imagen con alta definición a todo lo largo de la frontera, permitirá tener un mayor control sobre lo que ocurre en ella, y además mediante una aplicación en los celulares inteligentes, cada dominicano se podría convertir en un “centinela de la frontera”.

Como para mi, nuestro muro seria para lamentarse, también tomaría la costumbre que tienen los judíos de introducir un papel entre las rendijas del muro de las lamentaciones, haciendo peticiones a Dios. Yo pediría: Que se termine el “macuteo” militar, es decir que el militar destinado en la frontera para proteger la Patria, no la cambie (la Patria) por unas cuantas monedas; también pediría que haya un cumplimiento real de las leyes y el que no las cumpla sea castigado.

¿En serio piensan que un muro resolverá el problema de la inmigración ilegal? ¡Por Dios! con la mafia que existe ahí (la frontera) es muy probable que los mismos que están para cuidar que nadie se salte el muro, sean capaces de fabricar una escalera para que se “vuelen”; y voy más lejos, son capaces de hacer túneles debajo del muro, como hacía el “Chapo” para pasar su droga desde México a Estados Unidos .Y ya que hablamos de narcos, quiero enviar un saludo a “Willie el cowboy” que está por aquí con nosotros…