En República Dominicana fue implementada la ley de Seguridad Social, pero 23 años después, se mantiene la asignación de recursos al margen de la legislación, el clientelismo, el ausentismo laboral y bajo desempeño. A pesar de todo eso, se reparten recursos de la Seguridad Social entre recursos humanos ineficientes.

Así lo plantea, el escritor y economista Arismendi Díaz Santana, quien presentó su libro, “Historia y Fundamentos del SDSS”, con el auspicio del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC) y la Asociación Dominicana de Administradoras de Riesgos de Salud (ADARS).

No hay Atención Primaria y no se ha hecho la reforma al sistema nacional de salud. “Ningún sistema universal ha sido sostenible ampliando la brecha entre los público y lo privado”., plantea el escritor y diseñador del Sistema Dominicano de Seguridad Social, en su libro destinado a incentivar la discusión.

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La realidad penosa

Para cubrir la asignación de recursos en el Plan Básico de Salud y el Plan de Servicios de Salud, la cápita contributiva es 1,683.22 y la subsidiada apenas llega a 259.43, solo el 15.4%, analiza el escritor al poner su libro en circulación.

En el Subsidiado el Estado asigna el 85% directamente a los hospitales, sin importar la cantidad de servicios prestados y sin garantía de un retorno aceptable. Esta práctica penaliza a los más pobres, porque le carga a la cápita subsidiada el gasto millonario de nóminas.

Díaz Santana hace un recorrido histórico desde la génesis del SDSS y asegura que no es necesario modificar el Seguro Familiar de Salud para elevar la calidad de los servicios, reducir el gasto familiar de bolsillo y mejorar los indicadores de salud.

Comparaciones

El especialista analiza que en términos cuantitativos, las autoridades del Sistema de Seguridad Social han logrado una cobertura de un 98.5%, superando todas las exclusiones del viejo Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS). Sin embargo, este logro no ha podido reducir el alto gasto familiar, la mortalidad materna y la infantil, ni la satisfacción de la mayoría de los afiliados del sistema