Ninoska Cuevas 
Varios de los acusados de integrar una supuesta red dedicada al tráfico de mujeres extranjeras para explotarlas sexualmente en el país, y que fue desarticulada mediante la Operación Catteya, se declararon este jueves inocentes de los cargos imputados por el Ministerio Público.
«Inocente, inocente», se les escucha vociferar mientras eran conducidos por agentes penitenciarios a la Oficina de Atención Permanente del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, lugar donde les conocen medidas de coerción.
Los imputados en el caso son José Miguel Michel Guridis, Daniel Inirio Abreu, José A. Soriano Rosario; Óscar Wicene, Melvin Valentín Peguero, Cristina González Hernández, María Paula Murillo Vargas, Louis Marie Nephtalie, Oliver Arnaud Lewinsky y/o Timothy William Case Renee; Robert Lee, Eleuterio Paniagua Díaz, Angélica Jhoana Quintero Niño, Marie Fokina Achille, Alejandro Arturo Batista B., Ramón Oviedo C., Carlos Campusano D. y Bralio Lugo.
Más detalles
Según el Ministerio Público, los imputados en la Operación Cattleya, movilizaban a las mujeres con la promesa de un trabajo bien remunerado en República Dominicana. Y sin embargo, «las explotaban sexualmente».
Indica que una vez traídas al país, las víctimas eran obligadas a admitir que tenían una deuda contraída de entre US$3,000 y US$4,000 con las redes que las movilizaban, les obligaban a consumir sustancias controladas, las sometían a tratos vejatorios e infrahumanos y no les permitían ninguna libertad propia de cualquier ser humano, lo que llevó a varias de ellas a escaparse.
MP agrega que la víctimas eran amenazadas con venderlas a otros proxenetas si no pagaban, o con armas de fuego si se ponían rebeldes.
Las jóvenes eran retenidas en el Hotel Caribe, del Distrito Nacional, y en el Residencial Coco Real, en Bávaro, Punta Cana, provincia La Altagracia.
