La joven Yerilenny Herrera narró que se dirigía hacia su trabajo en San Gregorio de Nigua, en San Cristóbal, pero que a su mente llegaron pensamientos suicidas y tomó un autobús hasta el malecón donde pretendía lanzarse al mar.
La madre de cuatro hijos aseguró que hacía varios meses se encontraba en una depresión por los problemas económicos que enfrenta.
“Le aconsejo que busquen ayuda, me arrepiento. Le doy gracias a Dios y le pido perdón a mis hijos”, expresó la joven de 32 años de edad, al agradecer estar viva.
Es Herrera, quien es madre soltera, calificó como dos ángeles enviados por Dios los agentes del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) que le salvaron la vida.
En la actualidad se encuentra asistiendo a su trabajo y realizado su vida con normalidad y recibiendo terapias psicológicas.
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