La puerta de entrada del Laboratorio Nacional es un espacio de caos entre la multitud que espera desde la madrugada para hacerse una prueba de coronavirus, los porteros y los médicos. La gente se queja de que se colocó a un grupo en una fila paralela para darle entrada primero que al resto.
La seguridad lucha con la puerta para abrirla y cerrarla cuando llega una ambulancia del Ministerio de Salud Pública u otro vehículo privado, al tiempo que mantienen impedida la entrada para los demás.
Allí se mezclan los que quieren hacerse la prueba por sospechas de estar enfermos y los que están contagiados y necesitan saber si ya se curaron de la enfermedad. Todos aglomerados y bajo un sol que quema la piel.
Uno de los que esperan desde temprano es el señor Juan Felipe Álvarez. Necesita hacerse la prueba para que le dejen volver a su trabajo y porque su esposa ya tuvo coronavirus.
Otra señora se queja de que esta es la cuarta vez que pasa por ese proceso para descartar que ya no tenga el virus en su organismo.
La espera de afuera es solo para lograr entrar a formarse en otra fila que hay dentro aún más larga. El Laboratorio Nacional colapsó y las líneas telefónicias para conseguir una cita están saturadas, aseguró el doctor Eduardo Montaño.
Vestido completamente de blanco con un traje de bioseguridad, el doctor Montaño ofreció a los que esperan la alternativa de apuntarlos en una lista, reservándoles una cita para el día siguiente. El único requisito es tener una copia de la cédula. A continuación el video que muestra la situación:
Pero los que tienen hasta 6 horas esperando son incrédulos, dudan de que realmente los atiendan. Una señora le preguntó si trabajaría en sábado, el doctor respondió que sí.
Otra doctora trataba de organizar la fila y hacer que los que estaban en ella se distanciaran. Pocos hacían caso, y empezaron a reclamar la supuesta preferencia que tienen con algunos que entran y salen sin hacer fila. La doctora explicó que los que entran directamente es porque tienen cita previa solicitada por teléfono.
Los presentes se inscribieron en una lista, la segunda del día, esperando mañana tener mejor suerte. Un letrero en la entrada anuncia que el espacio debe vaciarse para recibir a los que van a buscar resultados de preubas entre las 2:00 y las 4:00 de la tarde.
Versión de Salud Pública
El Ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, explicó esta mañana que muchas personas asisten a hacerse pruebas sin la receta médica reglamentaria y sin cita, razón por la que se acumulan en el Laboratorio Nacional.
El ministro reconoció que están desbordados, por lo que habilitarán otros lugares en el espacio de la Universidad Autónoma de Santo Domingo para que los pacientes puedan esperar con más comodidad.
Ante la denuncia de «buscones» que presuntamente operan en el área, el funcionario prometió investigar la situación.