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Una madre de 19 años confesó asfixiar a su bebé tras estar con un hombre en la cama que supuestamente no era su cónyuge, y luego deshacerse del cadáver del infante en una localidad de Bonao, provincia Monseñor Nouel.
La joven, identificada hasta el momento como Patricia Santana, contó a las autoridades que dos hombres habían irrumpido en la habitación y posteriormente secuestraron al infante, pero tras las indagaciones de los oficiales confesó el crimen y alegó, con lágrimas en los ojos un profundo arrepentimiento.
“Yo lo meneaba, lo meneaba para que él reaccionara y le asoplaba la boca y no nada… después yo lo tiré por ahí, por el miedo de que iban a decir que yo era una asesina”, expresó la joven.
El cuerpo del niño fue enviado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) de Santiago para los fines correspondientes.
Santana es progenitora de dos niñas más con parejas distintas, en que la mayor de dos años y la menor de un año.
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