La respuesta de los gobiernos de turno a los excesos que cometen los agentes policiales en contra de ciudadanos, siempre se nutre de medidas vinculadas con la provisión de equipos, mejoras salariales, fortalecimiento de las áreas investigativas, depuración del personal y normativas éticas, dejando de lado uno de los males mayores de la institución: la cultura autoritaria impregnada desde su origen.
Ante los abusos recurrentes, que en estos días se han hecho más que evidentes por la muerte de tres jóvenes golpeados brutalmente en cuarteles policiales, cabe preguntarse si es posible transformar la Policía Nacional, como pretende el presidente Luis Abinader, si se deja intacto ese modelo basado en el irrespeto a los derechos humanos.
La sociedad no terminaba de salir del estupor por las muertes de David de los Santos, José Gregorio Custodio y Richard Báez, cuando se divulgaba por las redes sociales un vídeo en el que se veía a agentes policiales de Monte Cristi golpear a una mujer embarazada que supuestamente se resistió a ser detenida, ya que había una orden de arresto en su contra por violencia de género.
El hecho ocurrió a plena luz del día, en presencia de los transeúntes y de una menor de edad, hija de la víctima.
Los tres agentes involucrados fueron arrestados y suspendidos de sus funciones, pero quién garantiza que esos hechos no se repetirán, quién asegura que la desigual relación entre policías y ciudadanos será erradicada.
Cómo lograrlo si el autoritarismo y la intolerencia son males enquistados en la estructura social dominicana. La tarea es ardua.
MP pide prisión preventiva contra 4 agentes y 3 civiles por la muerte David de los Santos
El Ministerio Público solicitó prisión preventiva, como medida de coerción, contra cuatro agentes policiales y tres civiles involucrados en la muerte de David de los Santos Correa, golpeado de manera salvaje mientras se encontraba detenido en el destacamento policial del sector Naco, en esta capital.
Los responsables de la muerte del joven De los Santos Correa son el capitán Domingo Alberto Rodríguez Rodríguez, el segundo teniente Germán García de la Cruz, el cabo Alfonso Decena Hernández y el raso San Manuel González García (o Sari Manuel González García).
También, los civiles Santiago Mateo Victoriano, Michael Pérez Ramos y Jean Carlos Martínez Peña, quienes estaban recluidos en la celda de la cárcel del destacamento policial del sector Naco, en el Distrito Nacional, en la que los agentes imputados llevaron a la víctima el pasado 27 de abril, tras arrestarlo en Agora Mall, en donde la seguridad de la plaza comercial lo había retenido.