El 30 de diciembre de 2019, en un gran acto celebrado en el Estadio Benito Villamarín, el Real Betis Balompié presentó la renovación por dos años del contrato de su jugador Joaquín Sánchez Rodríguez (21-7-1981, El Puerto de Santa María, España), quien, a pesar de haber jugado en otros campos entre 2006 y 2015 (Valencia, Fiorentina, Málaga) siempre ha sido un símbolo, del conjunto sevillano donde regresó en el 2015.
En esa presentación, y en múltiples entrevistas que le habían realizado al portuense Joaquín, este manifestaba el sueño de levantar un trofeo como capitán del Betis, a pesar de que ya esta entrado en años (40).
Por eso, cuando clasificaron a la final de la Copa del Rey 2021-2022 veía más cerca realizar su sueño. Y así fue. El sábado, en el estadio La Cartuja de Sevilla, el Betis ganó su tercera Copa del Rey, para Joaquín fue su segunda (estuvo en la del 2005 ante Osasuna). En esta ocasión ante el Valencia, un gran rival, el partido llegó empatado a un tanto hasta los 120 minutos, por lo que se ejecutaron los penaltis, en cuya tanda anotó el segundo. Joaquín, así de sencillo, quien es el jugador histórico del Real Betis Balompié, finalmente levantó la copa viendo así realizado su gran deseo.
Le invitamos a leer: España-Inglaterra en las semifinales de la Liga de Campeones
Y dijo que juega un año más. Y lo de Juan Miranda es especial. En el partido de la final de 2005, en las gradas, así como en las celebraciones en Sevilla, había un pequeño de 5 años que disfrutaba con el Betis fotos hay). 17 años después, ese niño, hoy con 22 años, tuvo la responsabilidad de ejecutar el quinto penal del Betis que fue definitivo. Ese niño era Juan Miranda, quien desde el sábado quizás haya tomado la responsabilidad de ser un líder del futuro en el equipo verdiblanco. ¿Será el relevo de Joaquín?