El yate “Flying Fox” del magnate ruso Dmitry Kamenshchik, que estuvo anclado en el puerto Don Diego desde el 21 de marzo, abandonó este viernes las aguas de río Ozama, sin que las autoridades dominicanas hayan dicho nada de hacia dónde se dirige.
Se recuerda que esta lujosa embarcación estuvo detenida a solicitud de los Estados Unidos, que pidieron a las autoridades dominicanas su retención debido a que tiene abierta una investigación en contra de varios objetivos dedicados a supuesto lavado de activos a escala internacional.
Después de ser sometida a dos allanamientos por parte del Ministerio Público y estar bajo una constante vigilancia por la Armada Dominicana y del Cuerpo Especializado de Seguridad Portuaria (CESEP), esta magnífica nave salió sin que ninguna de las autoridades diesen alguna explicación.
El mega yate Flying Fox es el 20º, es el más grande del mundo, valorado en más de US$450 millones, fue lanzado en 2019 y tiene una longitud de 136 metros de eslora con una manga de 22.5 metros.