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Parecería lógico pensar que las amplias distancias que mediaban entre la España peninsular y sus distintas posesiones americanas y asiáticas afectaban, por igual, a cada una de estas últimas. Sin embargo, la plaza de Santo Domingo siempre fue acreedora de una condición especial. En primer lugar por su situación de tierra de frontera, y en segundo, porque reproducía fielmente, aunque en menor escala, el histórico antagonismo hispano-francés. De suerte que cuando estallaron en 1793 las Guerras de la Convención, la posesión insular se vio envuelta en un conflicto odioso y lejano, completamente ajeno a sus circunstancias políticas, económicas y sociales.
La contribución del vecindario dominicopolitano al esfuerzo bélico de la metrópoli, plasmada en una variopinta relación publicada en el “Mercurio histórico y político” de julio de 1794 y de la que nos hemos servido para confeccionar el siguiente elenco, ofrece al lector un bosquejo de excepción sobre aquella sociedad finisecular, a escasos meses de la cesión de Santo Domingo a Francia en virtud de la Paz de Basilea.
En primer término destacan los regidores del cabildo:
Gregorio Saviñón, natural de Santiago de Cuba, hijo de Juan Antonio Saviñón y Margarita Angulo. Marido de Micaela de Tapia, hija de Pedro de Tapia y de Ana de Castro.
Miguel Martínez Santelices, hijo del alcarreño Manuel Martínez y de Margarita de Venezia Santelices. Celebró un primer matrimonio con María Antonia Saviñón, hija de Gregorio Saviñón y Micaela de Tapia. Viudo, tomó por segunda esposa a Josefa Pichardo.
Francisco Tapia, desposado con María Rosa Marcano, a quien suponemos hija de Luis Marcano y Rosa Quevedo.
Silvestre Ramírez, hijo de José Jacinto Ramírez e Isabel Franco Guridi.
Francisco Cabral y Maldonado, regidor y alférez real. Era hijo de Miguel Cabral y Leonor Gregoria Maldonado. Había casado con Isabel de Herrera, hija de Domingo de Herrera y Francisca de Castro
Como secretario, figura el jerezano Diego Ximénez, esposo de Josefa Tirado.
Mientras que, por el estamento militar, comparecen:
Joaquín Colás, capitán del regimiento de infantería de Cantabria. Maridó con Juana Bustamante, hija de María de Belén Aponte y Juan Bustamante.
Joseph Tamarit, valenciano, capitán de milicias. Casado con María de la Encarnación Herrera, hija de Domingo de Herrera y Francisca de Castro.
Diego Camarena, sargento de milicias.
Antonio López, sargento del batallón fijo, desposado con Catalina Inés Moreno.
Tomás Arrufat, sargento de milicias, natural de Villanueva i la Geltrú. Consorte de María del Val.
Juan de Orozco, gaditano, alférez de navío, hijo de José de Orozco y Gertrudis Herrera. Casó en Cuba con Juana Arango y Castillo, hija de Anastasio Arango y Feliciana Núñez del Castillo.
Joseph de la Vega, capitán de milicias, placentino, hijo de José de la Vega y María Francis y Santello. Fue su mujer Antonia Galandier y Carrión, natural de Arecibo.
Juan Vidal, miliciano.
Joaquín Martínez, soldado, hijo de Alonso Martínez y Teresa Morillas. Marido de María de la Luz Andújar, hija de Pedro Andújar y Tomasina Driyo.
Manuel de Heredia, capitán de milicias, hijo de Domingo de Heredia e Isabel Serrano. Celebró desposorio con María Francisca de Mieses, hija de Juan de Mieses Ponce de León y Ana Guridi Leoz Echálaz.
Antonio Barba, brigadier, director de ingenieros y comandante de la plaza, hijo de Alonso Álvarez Barba y Ángela María Muñoz. Unido sacramentalmente a María de los Santos Leoz Echálaz, hija de Francisco José Leoz Echálaz y Juana Coronado.
Instituto Dominicano de Genealogía