LONDRES. La superviviente del holocausto más anciana del mundo, Alice Herz-Sommer, cuya historia cuenta un documental candidato a los Óscar, falleció en Londres a los 110 años, anunció el domingo su familia.
Judía nacida en Praga, pasó dos años de la Segunda Guerra Mundial en el campo de concentración de Terezín, en Checoslovaquia, donde distraía a sus compañeros de detención tocando el piano.
La vida de Alice Herz-Sommer, que conoció al escritor Franz Kafka, ha inspirado la película «The Lady In Number 6: Music Saved My Life», de Malcolm Clarke, candidata al Óscar al documental corto. Unos 140.000 judíos fueron deportados al campo de Terezín y 33.430 murieron allí.
Según su nieto Ariel Sommer, «Alice Sommer murió serenamente (…) con su familia a su lado». «Nos quería, reía con nosotros y disfrutaba de la música con nosotros.
Era una fuente de inspiración y nuestro mundo será más pobre sin ella a nuestro lado», añadió Ariel Sommer. Según la página del documental en la red social Facebook, Alice Sommer murió el domingo tras enfermarse unos días antes.
«Todavía vivía en su apartamento cuando se sintió mal el jueves, pasó dos noches en el hospital y murió el sábado», se dice en la página.
En el documental de 38 minutos que aspira al Óscar, la protagonista cuenta su vida y la importancia de la risa y la música para tener una vida feliz. «Soy judía, pero Beethoven es mi religión», explicó en una entrevista. «Pienso vivir mis últimos días, pero poco importa, porque mi vida ha sido muy rica.
Y la vida es magnífica, la naturaleza y la música son magníficas. Todo lo que vivimos es un regalo, un regalo que debemos mimar y regalar a aquellos a los que amamos», añadió.
– El odio conduce solamente al odio – En otra entrevista, aseguraba no haber odiado nunca: «el odio conduce solamente al odio».
«Si se puede disfrutar de la música, no todo está perdido. Nos conduce a una isla de paz, de belleza, de amor. La música es un sueño», estimaba. En su página web, Nicholas Reed, productor de «The Lady In Number 6», dijo de su película: «Los niños de todo el mundo se inspiran en superhéroes.
Lo que nosotros, sus padres, tenemos que recordarles es que los documentales explican historias de superhéroes que son reales.
Los superhérores se basan en personas extraordinarias, personas reales, como Alice Herz-Sommer». La crítica cinematográfica del diario LA Times, Betsy Sharkey, dijo que la película la impactó.
«Su historia empieza en Praga en 1903, donde era una niña privilegiada, su memoria se agudiza cuando recuerda las visitas a su casa de Franz Kafka y el compositor Gustav Mahler», narró Sharkey.
«La Segunda Guerra Mundial y los campos de exterminio de Hitler acabaron con esa vida, su talento con el piano la salvó».
«Lo que es extraordinario no es sólo la música tan bien interpretada cuando se sienta al piano en Number 6, sino que no guarde rencor», sentenció.