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La violencia intrafamiliar cobra vidas, arranca sueños, produce dolor, genera luto. Por eso dos mujeres que sufrieron maltratos y agresiones abren sus vidas y ofrecen sus testimonios, para que otras féminas escapen de ese flagelo.
Marivell Contreras e Ibeth Guzmán han organizado la muestra “Portadoras de Luz”, para invitar a las víctimas de la violencia intrafamiliar a salir de esa situación y comenzar de nuevo, armadas de valor.
A ellas se suma el pintor Benjamín Cruz, quien une 16 cuadros a 16 poemas de Contreras y Guzmán.
Contreras, quien fue víctima de violencia psicológica, deplora que no se destaque el valor de muchas féminas que han salido de la violencia.
“Nosotras sobrevivimos. Siempre contamos las muertas y no contamos la heroicidad de las mujeres que salen del círculo de la violencia. Entonces no les ponemos un espejo a ellas, que de alguna manera les dé el valor que necesitan”.
A su juicio, “la violencia no tiene género ni posición social e intelectual; cualquiera termina, sin darse cuenta, en un proceso donde es violentada”.
Contreras, periodista y escritora, explica que su caso fue bastante traumático, pues se sintió culpable de no haber sido capaz de librarse de la violencia.
Por eso sacó todo ese rencor que llevaba acumulado contra sí misma, y buscó ayuda profesional.
Superados sus traumas, ha llegado a comprender que lo más difícil no es lo que ocurre durante el proceso de violencia, sino lo que sucede después.
“En el momento uno no se da cuenta del proceso en que está, y yo tomé más conciencia cuando salí”.
Igualmente, Ibeth Guzmán fue víctima de violencia física y psicológica.
“Portadoras de Luz” es una exposición que se realiza en Ágora Mall, con motivo del Mes de la No Violencia contra la Mujer. Inició el 8 y concluirá el 23.
