Nueva York. La estadounidense Taylor Townsend puede ser la futura figura del tenis de su país, pero de momento, la reina indiscutible es Serena Williams, que comenzó la defensa del título del Abierto con una victoria clara por 6-4 y 6-1 ante su compatriota.

Ni la amistad, ni todo lo bien que le cae como persona y jugadora Townsend, de 18 años, a Serena Williams, impidió a la actual campeona del Abierto, que busca su sexto título, tercero consecutivo, darle una lección de lo que es el tenis de poder físico.

La menor de las hermanas Williams sólo necesitó 57 minutos para ganar con tranquilidad después de conseguir un 88 (21-24) por ciento de los puntos que disputó con el primer saque y se lo rompió cuatro, de cinco oportunidades, que le permitió Townsend.

Aunque el enfrentamiento entre el presente y el futuro del tenis femenino estadounidense era el más esperado en la pista central Arthur Ashe, de Flushing Meadows, pronto se desinfló el entusiasmo de los espectadores porque Townsend no tenía nada que aportar con su juego a la hora de querer dar la sorpresa.

Por el contrario, Williams, que vio como no pudo ganar ninguno de los tres títulos anteriores de Grand Slam, mostró desde el inicio del partido que ha llegado en plenitud de forma después de haber conseguido el título en el torneo Masters 1000 de Cincinnati.

La menor de las hermanas Williams metió 16 golpes ganadores por ocho errores no forzados, comparados con los 8 y 20, respectivamente, de Townsend, que subió 13 veces a la red y logró cinco tantos por 7 de 8 de Serena.

Serena, en segunda ronda, tendrá como rival a su compatriota Vania King, que se impuso por 6-3, 3-6 y 6-3 a la italiana Francesca Schiavone, campeona de Roland Garros, en el 2010, y dos veces alcanzó los cuartos de final el Abierto de Estados Unidos.

La jornada dentro de la competición femenina también dejó la victoria cómoda de la checa Petra Kvitova, tercera cabeza de serie, que se impuso por 6-1 y 6-0 a la francesa Kristina Mladenovic.

Kvitova, actual campeona de Wimbledon y reciente ganadora del torneo de New Haven, el último previo al Abierto de Estados Unidos, tendrá como rival en la segunda ronda a su compatriota y tocaya Petra Cetkovska.

También tuvo un debut ganador la canadiense Eugenie Bouchard, séptima favorita, que llega este año al Abierto con semifinales en los tres torneos grandes que ya se han disputado. Bouchard tampoco tuvo problemas a la hora de derrotar por 6-2 y 6-1 a la bielorrusa Olga Govortsova en 59 minutos de acción y tendrá como rival en la segunda ronda a la rumana Sorana Cirstea, que venció 6-1 y 6-1 a la británica Heather Watson.

La serbia Ana Ivanovic, octava favorita, no tuvo problemas en superar por 6-3 y 6-0 a la estadounidense Alison Riske y su rival en la segunda ronda será la checa Karolina Pliskova.

La italiana Flavia Pennetta (11) y la española Carla Suárez-Navarro (15) también lograron el pase a la segunda ronda, como lo hizo la bielorrusa Victoria Azarenka, decimosexta cabeza de serie, que regresó a la competición tras descansar en el torneo Masters de Cincinnati donde hubiese defendido el título de campeona.

El descanso no le impidió que tuviese que trabajar al máximo antes de imponerse por 6-7 (3), 6-4 y 6-1 a la japonesa Misaki Doi. Mientras que la gran sorpresa la dio la estadounidense Catherine Bellis al derrotar por 6-1, 4-6 y 6-4 a la eslovaca Dominika Cibulkova, duodécima cabeza de serie. Tampoco pudo superar la primera ronda la excampeona del Abierto, la rusa Svetlana Kuznetsova, vigésima cabeza de serie, que perdió por 3-6, 6-2 y 7-6 (3) ante la neozelandesa Marina Erakovic.

El tenis femenino latinoamericano siguió por el camino de la derrota después que la brasileña Teliana Pereira, de 26 años, que hizo su debut en el Abierto de Estados Unidos, perdió por 6-2 y 6-0 ante la rusa Anastasia Pavlyuchenkova.