ATENAS. De los Servicios de Hoy. El primer ministro griego, Alexis Tsipras, prometió un cambio «radical» a las políticas públicas, mientras que su Gobierno da pasos rápidos para dar marcha atrás a partes clave del rescate internacional griego, lo que llevó a un tercer día de pérdidas en los mercados financieros.
«Estamos empezando a cambiar radicalmente la forma en que se gestionan las políticas y la administración en este país», dijo Tsipras a los ministros en su primera reunión de gabinete.
Las prioridades serán ayudar a los sectores más débiles de la sociedad, con políticas para atacar el clientelismo endémico y la corrupción en la economía, además de atajar el desempleo, según el Gobierno, quien también prometió elevar las pensiones para quienes tengan menores ingresos y reincorporar a algunos funcionarios despedidos.
El nuevo Gobierno también mostró que no tiene intención de retractarse de sus promesas anti austeridad, lo que lo sitúa en la senda de un enfrentamiento con sus socios europeos, encabezados por Alemania, que ha dicho que no renegociaría el paquete de asistencia necesario para ayudar a Grecia a pagar sus deudas.
Tsipras añadió que su Gobierno perseguiría presupuestos equilibrados, pero no trataría de lograr «superávit irreales» para cumplir con la masiva deuda pública griega de más de un 175% del Producto Interno Bruto.
Mientras que los ministros aseguraron que darían marcha atrás a las estrictas políticas económicas impuestas bajo el programa de rescate de 240,000 millones de euros.
El ministro de Finanzas griego tiene previsto reunirse con sus colegas europeos para lograr un acuerdo entre Grecia y sus acreedores que sustituya al actual programa de rescate, subrayando que puede alcanzarse un pacto sin llegar a «un duelo» con Europa.
«Voy a tener reuniones similares destinadas a alcanzar un nuevo acuerdo, un puente entre los programas anteriores y el acuerdo final entre Grecia, la UE, el BCE y el FMI, vamos a deliberar en un periodo corto con nuestros socios europeos, con los acreedores, con el BCE», dijo Varoufaki, quien se reuniría con el jefe del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, y que buscaría apoyo de ministros de Finanzas de Italia y Francia.