La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia revocó la expulsión del soldado retirado Francisco Eladio Uribe Ochoa, vinculado al asesinato del expresidente de Haití, Jovenel Moïse, y ordenó tramitar «un incidente de incumplimiento que podría resolverse conservando o no su participación» en el alto tribunal.

Así lo informó la JEP, que detalló este miércoles que «la notificación de dicha decisión se hará a través de la Embajada de Haití en Colombia, con los buenos oficios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia».

Según la Policía haitiana, 18 militares retirados colombianos, entre ellos Uribe, fueron capturados por tras el asesinato de Moise, el 7 de julio de 2021, y otros tres fueron abatidos.

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De acuerdo con las investigaciones, el magnicidio fue cometido por un comando de 26 mercenarios colombianos que irrumpieron de madrugada en la residencia presidencial, sin hallar resistencia por parte de las fuerzas de seguridad que custodiaban la mansión, situada en el sector de Pelerin, en Puerto Príncipe.

En agosto del año pasado, la Defensoría del Pueblo de Colombia denunció que los 18 exmilitares colombianos estaban hacinados, incomunicados y permanecían esposados en la cárcel desde su arresto.

La JEP decidió revocar la expulsión del militar retirado al considerar que «no es cierto que su responsabilidad penal sea igualmente revelada».

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«Además de la ausencia de elementos concretos e inequívocos de los cuales se pueda advertir su culpabilidad, tal como lo ha señalado su apoderada judicial, no se ha desvirtuado la presunción de inocencia de su prohijado, quien, además, hasta donde se tiene conocimiento, se encuentra alegando inocencia, no ha reconocido cargos, ni ha sido condenado», agregó la JEP en un auto.

Igualmente, el alto tribunal ordenó al Ministerio de Relaciones Exteriores «realizar todos los esfuerzos diplomáticos a que haya lugar para establecer, cuanto antes, la situación jurídica y las condiciones de detención en las que se encuentra» el militar en Haití.