Uno de los momentos más intensos de la obra que muestra el lado más oscuros de las almas que aún desean vivir.
rosmery m. de los santos
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Obra de teatro. Bajo la dirección de Carlos Espina se está presentando esta pieza en la Sala Ravelo del Teatro Nacional, con las actuaciones de José Lora (Checho), Sabrina Gómez, Ana Rivas y Patricia Ascuasiati. La obra estará en escena hasta el próximo fin de semana
Vale la pena vivir fingiendo algo que no somos? ¿Eso realmente nos hace felices? Tal vez, esas respuestas se encontraran en otra vida, o quizás en esta. Pero, la obra “A puerta cerrada”, nos da un vistazo sobre este planteamiento.
Bajo la dirección de Carlos Espinal y con las actuaciones de José Lora (Checho), Sabrina Gómez, Ana Rivas y Patricia Ascuasiati, esta pieza estrenada en París, en mayo del 1944, se presentó en la Sala Ravelo del Teatro Nacional.
Escrita por el filósofo y escritor francés Jean-Paul Sartre, “A puerta cerrada” se abren las almas de tres personas que encarnan Sabrina, Ana y José Lora los cuales llevaron cada uno su rol con altura y transmitir el mensaje de sus respectivos personajes.
Patricia Ascuasiati, fungió como el anfitrión de aquella habitación minimalista, en donde adornada con solo tres muebles de época y una escultura, esperaba recibir a aquellas tres almas que tenían el reto de convivir para toda la eternidad, entres sus pecados, miedos y secretos más obscuros, que según Garcin, personaje que realizó José Lora, cada uno debía de revelar para “vivir” en paz consigo mismo.
Aunque todos en esa habitación, tuvieron el pensamiento de que un torturador los haría pagar por lo que en vida hicieron, la gran sorpresa fue enterarse de que ellos mismo serían sus propios verdugos.
La dirección musical estuvo a cargo del Maestro Dante Cucurullo, quien junto a los demás músicos ambientaron las escenas que mantuvo al público atento. La musicalización de “A puerta cerrada”, se realizó en vivo, lo que le sumó más drama y calor a cada escena, aunque consideramos que el introducción musical de la obra estuvo un tanto extensa.
Dentro del elenco, se destaca Sabrina Gómez en la piel de Inés una honesta una secretaria de correos, que está consciente de merecer estar a donde el destino la llevó tras su muerte.
Sabrina resalta por su actuación orgánica y al igual que Ana Rivas al parecer nacieron para encarnar sus estos personajes.
José Lora y Patricia, también actuaron al nivel que le exigen sus personajes.
Cabe resaltar que en el teatro se respetó el protocologo de distanciamiento social y el uso de mascarilla.
Algo más. A Puerta Cerrada, en francés Huis Clos, es una obra existencialista que subió a escena en el Teatro del Vieux-Colombier, justo antes de la liberación de la ciudad de París durante la Segunda Guerra Mundial. La obra contiene la cita más famosa de Sartre: El infierno son los otros.
Para Jean Paul Sartre, la mirada del otro es el infierno. Impide ser, aunque es la única que permite manifestarse de algún modo en el mundo. Siendo así, la opinión del otro es importante. Es una crítica a la sociedad actual, que vive preocupada por los juicios externos.
Hay miedo a mostrarse; y la salida es: un mundo de apariencias. Ocultando el ser, el honor al vacío impone una máscara, es el infierno de ser lo que se pretende que al otro le importe que yo sea.
Esta obra cuenta con los auspicios de la Embajada de Francia en República Dominicana, la Fundación Amigos del Teatro Nacional, el Ministerio de Cultura y el Banco Central.
Las presentaciones serán de jueves a domingo, en la Sala Ravelo. Las boletas están a la venta en la boletería del Teatro Nacional con un costo de $1,000.