El equipo de defensa del conductor Eduardo Guzmán Valdez calificó el hecho como “fortuito, imprevisto y lamentable”
El equipo de defensa de Eduardo Guzmán Valdez explicó que el accidente de tránsito ocurrido el 18 de agosto de 2022 a la altura del Km 2 1/2 de la Autopista Duarte y donde falleció el joven Imanol Manuel Mercado Cruz, se produjo por no haber utilizado el único paso peatonal localizado en la zona.
Los abogados Manuel Alejandro Rodríguez, Laura Rodríguez Cuevas y Catalina Fernández indicaron que el joven fallecido, quien se desplazaba con audífonos puestos y sin ningún adulto que lo acompañara, cruzó corriendo y sin mirar a su derecha por un espacio no destinado al paso de peatones, lo que impidió que el conductor Guzmán Valdez pudiera evitar la ocurrencia del accidente.
En ese sentido, presentaron una certificación emitida por el Ayuntamiento del Municipio de Santiago, donde se establece que “desde la estación de combustible Total Monumental y la calle Piki Lora solo existe un único paso peatonal, que se encuentra en la intersección de la Autopista Duarte y la calle Piki Lora”, mismo que no fue utilizado por el menor al intentar cruzar la autopista, según registran los videos de las cámaras de seguridad de distintos establecimientos comerciales de la zona, obtenidos por la Fiscalía de Santiago.
Tras calificar el incidente como lamentable, la barra de la defensa manifestó su solidaridad con los padres del menor de 16 años por la pérdida irreparable de su hijo en un “incidente innegablemente triste”.
Los abogados destacaron que Guzmán Valdez transitaba conforme a las reglas de seguridad vial a una velocidad muy por debajo del límite permitido en una autopista y “nunca tuvo la intención de causar ese accidente ni tampoco se comportó de forma alguna que pueda razonablemente atribuírsele responsabilidad jurídica por dicha tragedia”.
“Según los videos de las cámaras que captaron el incidente, el señor Guzmán Valdez se desplazaba en su vehículo con evidente prudencia y pericia, lo que da a entender que se trató de un hecho fortuito, imprevisto e inevitable, que pudo suceder a cualquier otra persona por desgracia del azar”, indicaron los juristas.
Reseñaron que Guzmán Valdez, quien es un empresario, padre de dos niños de 7 y 12 años, es un joven con una familia estable, sin antecedentes penales y cuya vida ha sido afectada profundamente a causa del accidente de tránsito.
Afirmaron que, tras ocurrir el accidente, su defendido resultó lesionado y recibió atenciones en el Hospital Metropolitano de Santiago (HOMS) por un cuadro de dolor toráxico y lesión de origen contuso y que a 10 meses del lamentable incidente se encuentra recibiendo asistencia psiquiátrica en la Clínica Unión Médica de la ciudad de Santiago de los Caballeros.
En ese sentido, los abogados confían en que el juez que conoce la audiencia preliminar del caso en la Segunda Sala del Juzgado de Paz Especial del Tránsito del Distrito Judicial de Santiago actuará en buen derecho, respetando la normativa jurídica que dictamina este tipo de incidentes.