El ministro de Agricultura, Ángel Estévez, enfatizó que desde que fue detectada la presencia en el país del caracol gigante africano (Achatina fúlica), la entidad ejecuta el protocolo internacional de erradicación en una zona residencial de Bávaro.
Indicó que el mismo se encuentra focalizado y que no se ha extendido a ninguna otra zona de la provincia La Altagracia.
Estévez afirmó que desde que fue detectada por técnicos del Agricultura la presencia del caracol en la comunidad de El Cocotal, en Bávaro, la entidad puso en ejecución el protocolo para eliminación del molusco, con el apoyo de organismos internacionales.
El titular declaró que, “desde que fue detectada en el país la presencia del caracol gigante africano, Agricultura junto a organismos internacionales han tomado las medidas para eliminarlo. Sostuvimos una reunión con el doctor norteamericano David Robinson, malacólogo (especialista en caracol) del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (APHIS), para poner en ejecución el protocolo en el país, y que en el mismo trabaja el equipo que se ocupó de la eliminación de la Ceratitis Capitata (Mosca del Mediterráneo) de la zona Este de la República Dominicana”.
Explicó que el protocolo consiste en la aplicación de un molusquicida que destruye la babosa, además de la eliminación de las fuentes de alimento y hábitat de reproducción, como son arbusto, maleza en los suelos y debajo de los árboles; luego se realiza una segunda aplicación del químico que elimina el caracol, ya que este se entierra y cuando sale a alimentarse muere.
“Junto a estas medidas, se procede a la recolección de los cascarones y babosas que pueda aparecer y se procede a incinerarles y enterrarles, aplicarle cal y otros químicos que destruyen completamente el parásito como indican las reglas del protocolo”, puntualizó.
Precisó que el molusco no representa ningún daño a la producción nacional, ya que esta focalizado en una zona residencial de Bávaro, y que se están dando los pasos finales para su erradicación.
El funcionario dijo que se estima que la entrada del caracol a República Dominicana, pudo ser a través de un turista, ya que el molusco es utilizado como mascota por los atractivos colores que le caracterizan.