Ayudemos que Intrant haga su trabajo. Que el ingeniero Milton Morrison expanda sus iniciativas en Santiago y Santo Domingo. En especial en puntos críticos para prevenir mortalidades por accidentes. Que el imperio de la ley y la norma se imponga.

Que todo el mundo se alinee bajo los mandatos de la ley 63-17 y normas del Intrant y los ayuntamientos. Esta sería una primera Fase de Impacto Rápido (FIR) en el eje Santiago-Santo Domingo-Sur.

Ahora debemos hacer cálculos y reservas presupuestarias, pero que se implanten en una segunda Fase de Proyectos Estructurantes (FPE), las iniciativas como las grandes paradas de buses; masiva semaforización, atractiva señalización y estacionamientos urbanos regulados.

Ahora es el momento de cumplir y hacer cumplir la ley y las normas. No hay que tener contemplaciones con nadie. Ni grandes, ni pequeños. En México y Europa, las personalidades excelsas cuando violan la ley, pagan su multa y graban mensajes educativos.

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Los archivos del Plan Estratégico de Santiago registran al menos cuatro cartas de pasados directores del Intrant. Fueron generadas como respuesta a los artículos que Carlos Alfredo Fondeur, pasado presidente del Consejo Estratégico, nos sugirió escribir en varios medios de comunicación, sobre el desorden del tránsito, transporte y seguridad vial.

El pasado gobierno lanzó una costosa, fatua e inútil campaña sobre movilidad y seguridad vial. Todos los medios escritos, radiales, televisivos, web y redes sociales promovían mensajes grabados por artistas de la talla de Juan Luis Guerra y otros que pedían “respetar las luces de los semáforos”. Bueno, pero insuficiente.

Con la prudencia que caracteriza esta tecla, ironizamos esas promociones. Nos basamos en informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Indicamos que cientos de estudios, cálculos y gráficos, no habían identificado “que respetar una luz roja” eran causa precipitante de las altas mortalidades por accidentes en la República Dominicana.

Hay cuatro causas que todavía siguen intactas: i) ausencia de cascos homologados en motociclistas; ii) manejar bajo efectos del alcohol, iii) altas velocidades y iv) no uso de cinturones de seguridad en todos los usuarios del vehículo.

Tenía un as bajo la manga: la tesis de maestría en planificación y epidemiología que realicé en el Centro de Investigaciones de Salud (CIES) de Centroamérica. Fue un estudio premiado como la mejor investigación de ese año: “Epidemiología de los Accidentes de Tránsito” que demostró lo mismo.

Los fallecidos por accidentes de tránsito en CA llegaron a ser más que los generados por las guerras en esas naciones. ¡Al fin Intrant hará su gestión!